El traje de Tuna
Recopilación histórica de sus elementos Félix Martín Sárraga
Agradecimientos
A la Tuna de Medicina de Murcia, cuyos veteranos me enseñaron la tradición y me hicieron amar a la Tuna. A TunAmérica Universitaria de Puerto Rico, ejemplo de hermandad sublimada. A la Tuna de la UNED de Elche, mis ahijados, excelentes representantes del Buen Tunar. A la Tuna Universitaria de Beja, mis ahijados portugueses, para que valoren sus raíces aunque su traje de Tuna sea diferente. A Adriana Meluk Orozco, mi esposa, por ser de las poquísimas mujeres que aman, entienden y vive la Tuna como yo.
Prólogo
Esta recopilación es la actualización de una
previa que escribí el 1 de junio de 2011 y que los nuevos datos han mostrado
inexactos algunos contenidos de aquella primera. Supone igualmente el fruto de
una búsqueda de datos publicados por diferentes autores que han dedicado su
tiempo y esfuerzo a investigar sobre los
orígenes del traje de Tuna.
Lógicamente, tras más de 30 años de viajar
como tuno por cuatro continentes, hay datos publicados que comparto plenamente
desde antes de leer las referencias bibliográficas porque, desde pardillo, se
me transmitieron pero el valor reside en que, gracias a los investigadores
citados, hoy podemos afirmar categóricamente su veracidad. También hay ciertas
anotaciones que son propias, pero carecen de mérito por obvias y sólo se
plasman como explicación necesaria para el profano.
El principal motivo que me llevó a poner en
un solo documento todos los datos que hacen referencia a nuestra manera de
vestir es ayudar en la formación de los pardillos y, secundariamente, también
para lograr una visión cronológica global, así como para entender el
significado y origen de algunos de los elementos de nuestra vestimenta.
Confío que sea de utilidad e invito al lector
a adentrarse en el tema leyendo las referencias bibliográficas que encontrarán
al final del artículo.
Murcia, a 12 de enero de 2013.
Félix O. Martín Sárraga
El autor es:
Presidente fundador de
TVNAE MVNDI (www.tunaemundi.com)
Tuno de:
Tuna de la Facultad de Medicina de
Murcia
TunAmérica Universitaria de
Puerto Rico
Tuna Universitaria de Beja
(Portugal)
El
autor está hermanado oficialmente:
Por vía de la Tuna de la
Facultad de Medicina de Murcia, con:
Tuna Universitaria de
Oporto (Portugal)
Tuna de Medicina de La Laguna (Tenerife)
Por vía de TunAmérica
Universitaria de Puerto Rico con :
Tuna Académica da Escola
Superior Agrária de Beja (Portugal)
El traje de Tuna supone uno de los elementos
más característicos. Y decimos con mi querido amigo y maestro Rafael Asencio
González "traje de Tuna" y no "de Tuno" por la misma
sencilla razón: Cualquier integrante de la Tuna tiene en su armario o ropero varios trajes
para ponerse y salir, por ello cualquier traje (como los usados para ir a la
oficina) es un "traje de tuno" porque quien lo viste lo es.
“Solamente ese traje negro que vestimos cuando salimos a cualquier actividad de
la Tuna es el
traje de Tuna porque nos identifica como integrante de la Tuna, es por ello un traje de
Tuna y no de Tuno” (2).
Si bien en Portugal y algunos países
hispanoamericanos el traje de Tuna es diferente, describimos aquí el patrón
ampliamente aceptado en España desde finales 1878, pues es allí donde se surgió
este movimiento estudiantil a partir de las comparsas carnavalescas de la
década de 1840, pero con materiales ricos y diseño por el sastre del Teatro
Real (3), que posteriores investigaciones personales han desvelado que se trató
del Sr. Lorenzo Paris (4). Está integrado por:
▪ Jubón:
Chaqueta ajustada (1) de terciopelo negro, de la que hay referencias ya en el
siglo XIV y su origen se remonta a la “loba”, sotana de paño, al parecer corta
y sin mangas, que usaron los estudiantes de las primeras universidades (9). Los
estudiantes de finales del siglo XIX “vestían jubón negro sin faroles (adornos
a modo de "cintas abombachadas" que se sitúan en la zona del brazo),
prendiendo en una de sus mangas un lazo de color según su Facultad de
procedencia” (11). Los faroles fueron “introducidos en 1878 por el sastre del
Teatro Real” (2), que enriqueció significativamente la vestimenta (signo de
mayor poder adquisitivo) ya que parece ser que los universitarios menos
pudientes llevaban “jubones sin mangas o de mangas lisas” (3).
▪ Pantalón
o falda:
Los pantalones podían ser:
a) Cervantinos: “Anchos y
cortos” (1), abombachados, con o sin "faroles" y ajustados al muslo
por abajo del pliegue glúteo; son un remanente del Romanticismo español y
solían usarlos los estudiantes más pudientes.
b) Gregüescos:
Introducidos en el siglo XVI, continuaron usándose en el XVII. Eran unos
calzones lisos y muy anchos que llegaban hasta debajo de la rodilla.
c) Taleguillas: Calzón estrecho y hasta debajo de la rodilla.
Las mujeres integrantes de una Tuna usaron
inicialmente falda, cuyo uso está documentado por el autor de esta recopilación
en las Estudiantinas Universitarias Mixtas existentes en 1929, y fue igualmente
de terciopelo negro y larga, hasta los tobillos. En el presente las hallamos
preferentemente en las integrantes de Tunas y Estudiantinas Femeninas de Chile,
siendo habitual en las Tunas Femeninas del resto del mundo el uso de
taleguillas o cervantinos.
▪ Beca:
Banda de fieltro de origen medieval, colocada sobre la vestimenta o manto,
que cruza el pecho a modo de una "V" cuyos extremos cuelgan posteriormente
sobre los hombros, según estilo del Colegio (inicialmente dependientes de la Iglesia pero posteriormente
también en los Colegios Mayores, los Colegios Reales o Imperiales) (8).
El uso de la beca en la Tuna es relativamente tardío.
Las primeras Tunas Universitarias (finales del siglo XIX y principios del siglo
XX) llevaron un “lazo del color de la Facultad en el hombro del jubón del estudiante
que dejaba patente los estudios que realizaba” (2), hecho que se
institucionalizó bajo la dictadura franquista mediante Orden de 12 de
noviembre de 1955, núm. 195 (BOE 7 diciembre 1955), cuyo artículo 7º dice:
“En el brazo izquierdo llevarán los tunos el lazo con los colores de la Facultad o Escuela
Especial a la que pertenezcan y sobre el nudo el emblema del SEU. La bandera
llevará en una de sus caras la enseña del Sindicato y en la otra el color del
Distrito Universitario”.
El primer escrito que señala el código de
colores de aquellas becas colegiales (que luego se trasladó a los lazos de los
tunos) es una obra del siglo XVII de Calderón de la Barca (6), pero “estudios
posteriores hacen pensar que la elección de colores para cada carrera fue
aleatoria” (2). No obstante, “en España su color depende se los estudios
del centro universitario, siendo de la siguiente manera:
Rojo: Derecho
Amarillo: Medicina
Azul celeste: Humanidades
Verde: Veterinaria
Naranja: Económicas y Empresariales
Marrón: Ingenierías
Violeta: Farmacia
Morado: Psicología
Blanco: Bellas artes y Teología
Gris plomo: Ciencias de la información” (1)
“Azul oscuro: Ciencias
Morado: Farmacia
Cobre: Carreras técnicas
Los nuevos estudios incluidos en la Ley de Reforma Universitaria española
significaron una nueva hornada cromática para las nuevas titulaciones” (7)
Dicho todo esto hay que señalar que no fue
hasta el entorno de 1940 cuando empiezan a verse en España Tunas con beca (Asencio
González ha identificado a la Tuna Universitaria de Sevilla que la usó en 1939)
y no se popularizó su uso en España hasta la década de 1960-1970 (12).
En la beca, y sobre el corazón, va bordado el
escudo de la Facultad,
pudiendo o no acompañarse del de su Universidad en el lado contrario. La beca
se le impone a un novato cuando la
Tuna en su conjunto considera que ha logrado un grado
suficiente de veteranía (saber estar, saber tocar instrumentos, saber cantar,
así como tener los requisitos que el buen tunar impone: ingenio, sentido del
humor, picaresca y caballerosidad, cualidades todas destacadas por Asencio
González (5) “para poder representar dignamente tanto a su Tuna (honrando así a
su Facultad y Universidad) como a la
Tuna” (2), nuestra institución.
La beca “es una distinción que exige un
alto grado de compromiso y responsabilidad” (8). Actualmente la beca se
tiene como signo distintivo del universitario (en actos protocolarios) y del
Tuno (2).
▪ Camisa:
Blanca, de manga larga amplia y ancha cuyos los puños llevar pliegues o
puntillas. Puede igualmente atarse con un cordón al pecho en lugar de botones y
presentar cuello con más o menos pliegues almidonados, llegando a su máximo en
el estilo cervantino, cuello adornado con puntillas o simplemente ser de cuello
liso y amplio. Últimamente, quizás por dificultad para encontrar personas
capacitadas en su confección, se usa también el más moderno "puño
camisero" de los trajes ejecutivos actuales.
▪ Cinturón:
Correa hecha del mismo material que el jubón y pantalón, con hebilla plateada
de generosas dimensiones (pero sin exagerar).
▪ Calzas:
Actualmente relegadas a las medias negras que cubren la parte de los muslos y/o
piernas que deja expuesta el pantalón, usadas ya en el siglo XIII. Algunas
Tunas hacen vestir calzas de color a sus pardillos, mostrando así la jerarquía interna
o ROA (Riguroso Orden de Antigüedad).
▪ Zapatos:
Negros, preferiblemente con cordones. Inicialmente tuvieron una amplia hebilla
que ha caído en desuso.
▪ Sombrero:
a) Bonete: Sombrero de cuatro picos (9)
“formando una cruz” que “lucía encima una borla del color que la simbología
asignaba a cada rama de la ciencia cuando el estudiante alcanzaba el grado de
Doctor”. En desuso.
b) Chambergo: “Sombrero de copa más o menos
acampanada y de ala ancha levantada por un lado y sujeta con presilla, el cual
solía adornarse con plumas y cintillos y también con una cinta que, rodeando la
base de la copa, caía por detrás” (10). En desuso.
c) Sombrero de medio queso y Tricornio: Los
estudiantes levantaron las dos mitades de las alas del chambergo por encima de
la copa y las sujetaron con la presilla, dando lugar al sombrero de medio queso
y al tricornio, llamado así por su característica
forma triangular (10). En desuso.
d) Bicornio: Sombrero de dos picos (10)
resultante de doblar las alas por los dos lados, vestigio del “tricornio
que, con los años, fuera perdiendo su acentuada forma triangular”(9). En
desuso.
▪ Capa:
Prenda del siglo XVII que se incorporó a la vestimenta de las Estudiantinas en
el siglo XIX. Confeccionada en paño negro, cubre desde el cuello hasta las
pantorrillas y su fin principal es proteger del frío al tuno en las noches de
invierno. Su largo depende de la estatura del tuno, pero colocada al cuello y
sobre los dos hombros debe llegar hasta las pantorrillas.
Se ata en bandolera por debajo del hombro del
“miembro superior dominante” (1), con un grueso cordón de seda trenzada. En
ella el tuno sólo coloca los escudos ("parches") de las ciudades y países
por los que ha viajado en viaje de tuna, colocándolos en el borde derecho en
hileras verticales. Hay tunas que el forro interior de la capa es del mismo
color de su beca, otras sólo llevan del color de su beca una discreta una
cenefa, mientras que una gran parte de Tunas lo lleva en raso negro.
De igual modo sirve para lucir las cintas que
le regalen al tuno, que se cosen rodeando el cuello de derecha a izquierda y
van rematadas en su extremo superior, en grupos de 3 a 5, por escarapelas.
▪ Cintas
de la capa: De uso generalizado a mediados del siglo XX, hasta entonces la
capa sólo hay escasas referencias indicando que lucía “las cintas de los
corpiños de las amantes del escolar” (9). Siempre han de ser regalo de sus
admiradoras que bordan en ellas un mensaje personal.
En cuanto a la tela con la que están hechas
lo habitual es que sean de "raso". Suelen hacerse de 4 o 6 centímetros de ancho
que son medidas standard en estos productos. Sobre el color no hay nada
definido, por lo que siempre lo elige quién la borda. Su longitud es como de 2-3 centímetros más
corta que el largo de la capa. Se cosen a unos 2-3 centímetros del
borde del cuello en grupos de 4-5 y tapando la unión de todas con un remate, la
“escarapela”, hecha con 2-3 cintas fruncidas a modo de círculos concéntricos
(este adorno no debe ser excesivamente grande, siendo habitual que tenga
de 7 a 12 centímetros de
diámetro).
▪ Escudos:
Se colocan en la capa y necesariamente han de ser alegóricos a lugares
(ciudades o países) visitados en viaje de tuna, aunque en los últimos se hace
cada vez más frecuente verlos en alusión a tunas amigas, certámenes, encuentros
o congresos de tunas. Coloquialmente conocidos como “parchos”.
Para finalizar, y para contrarrestar a
quienes encuentran que nuestra vestimenta raya en lo ridículo, basta decir que las
vigentes reglas de protocolo permiten vestir de Tuna ante cualquier Rey del
mundo, e incluso ante S.S. el Papa…. ¿no es suficiente para mostrar orgullo
cuando lo vestimos?
Referencias bibliográficas:
1.
Almenara, M (‘D. Bécquer’). Capa, Gregüesco, Jubón, Bicornio y Beca. En: http://www.tunos.com/foro/index.php?showtopic=5144&st=0. 2011.
2.
Asencio González, R. Entrevista personal. 23/05/2011.
3.
Asencio González, R. Historia y orígenes de la tuna. Publicado en http://www.tunaempresariales.uji.es/historia2.htm
2011.
4. Félix
O. Martín Sárraga. Crónica del viaje de la Estudiantina Española
al Carnaval de París de 1878 según la prensa de la época.
Publicado el 03/01/13 en: http://tunaemundi.com/index.php/component/content/article/7-tunaemundi-cat/166-cronica-del-viaje-de-la-estudiantina-espanola-al-carnaval-de-paris-de-1878-segun-la-prensa-de-la-epoca
5.
Asencio González, R. Estudianterías de antaño y hogaño. En: http://rafachencho.wordpress.com/2010/12/23/tuna-°©‐de-°©‐la-°©‐facultad-°©‐de-°©‐medicina-°©‐de-°©‐cordoba-°©‐estudianterias-°©‐de-°©‐antano-°©‐y-°©‐hogano-°©‐texto-°©‐completo-°©‐de-°©‐la-°©‐primera-°©‐parte-°©‐del-°©‐libro/ 2011.
6.
Calderón de la Barca,
P. La protestación de la fe. En: Biblioteca virtual Miguel de Cervantes, http://www.bubok.com/libros/17950/Laprotestacionde-la-fe, 2011.
7.
Darias Príncipe, A. Los colores de la indumentaria académica: pasado, presente
y futuro. En: http://protocolouniversitario.ue.es/2encuentro/IIencuentro_15.pdf. 2011.
8. Gordillo
Pérez, Luis I. Revista Deusto n.º 99, en http://archivodelapromociondel77.blogspot.com/). 2011.
9. Pérez
Penedo, E. La evolución del traje escolar. Desde el inicio de las universidades
hasta 1835, año en que se decretó su desaparición. Ponencia al Tercer Seminario
Internacional del Buen Tunar. La
Serena, Chile. Enero de 2004. Publicada en: http://termac.es.tl/%3Cimgsrc%3D-g-http-d--s--s-www-.-freeiconsweb-.-com-s-Icons-s-16x16-.-~-.-New-.-~-.-icons-s-New-.-~-.-icons-.-~-.-44-.-gif-g-%3E-La-Evolucion-del-Traje-Escolar.htm
En: Pérez Penedo, E. Asencio González, R. Tradiciones de la antigua
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Alicante, 2004.
10. Real
Academia Española de la
Lengua. En: Diccionario de la Lengua Española, http://www.rae.es/rae.html
2011.
11.
Vomelová, Karla. Fenomén tuna - jeho historie a soucasnost. Univerzita Palackého
V Olomouci, Eslovaquia. 2008.
12. Félix O. Martín Sárraga. Sociedad, Universidad y Tuna, ponencia al I
Congreso Iberoamericano de Tunas. Centro Cultural Puertas de Castilla, Murcia
(España). 13 de abril de 2012.
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