Con el verano a punto de terminar y la vuelta a la rutina como modus operandi generalizado, The Ritz-Carlton, Abama se presenta como la mejor alternativa para una escapada adaptada a todo tipo de viajeros. Si lo que se desea es alargar las vacaciones o, por el contrario, busca alargar la sensación de estar de vacaciones mientras trabaja en remoto, el resort de lujo es perfecto para ambas opciones.
Situado en la costa suroccidental de Tenerife, The Ritz-Carlton, Abama, es un oasis de sol y agradables temperaturas durante todo el año. Frente al Océano Atlántico, en plena naturaleza y rodeado de una profusa vegetación subtropical, las increíbles instalaciones del hotel ofrecen múltiples posibilidades a la hora de relajarse y disfrutar.
Adaptándose a las necesidades de un consumidor que muestra nuevas formas de vivir y viajar, el hotel, que ya diseñó un conjunto de experiencias de larga estancia el año pasado (The Great Escape), ofrece todas las facilidades y privilegios que implica el poder trabajar e incluso estudiar en el caso de los más pequeños desde un magnífico resort situado en un enclave privilegiado con innumerables posibilidades para disfrutar del aire libre y la naturaleza en el tiempo de descanso. El llamado bleisure, que es sencillamente el arte de combinar trabajo y placer, ayuda a encontrar el equilibrio entre la vida personal y profesional, lo que se materializa en la nueva tendencia turística, workcation, una oportunidad que el trabajo en remoto brinda a gran parte de los trabajadores al permitir desempeñar su labor desde cualquier punto, conjugando trabajo y placer a partes iguales. Con este fin, The Ritz-Carlton, Abama ofrece a estos huéspedes un espacio separado y privado anexo a la habitación, que podrá emplearse bien como oficina o bien como aula, en caso de poder llevar a cabo la escolarización en casa, además de unas instalaciones únicas en las que disfrutar de su tiempo libre..
The Ritz-Carlton Spa ofrece una amplia variedad de tratamientos revitalizadores inspirados en el mundo natural y las tradiciones locales. El gimnasio,abierto las 24 horas,ofrece una variedad de máquinas de ejercicio cardiovascular de última generación, con bicicletas de spinning en la terraza.Los senderos para correr y caminar a través de los jardines botánicosson parte esencial del recorrido del huésped que desea disfrutar yejercitarsu cuerpo al aire libre.
Del mismo modo elresortbrinda a todos sus huéspedes acceso directo a la playa de Abama, donde cuentan con un área privada de hamacas y sombrillas, el servicio del staff,y unBeach Clubqueofrece platos frescos y ligeros, bebidas y cócteles.
Villa Club es un innovador y concepto que brinda privacidad, espacio y exclusividad con sus atractivas habitaciones y suites ubicadas entre calles privadas. Todas ellas están distribuidas en las ya famosas "Casitas" y rodeadas de jardines y piscinas semiprivadas, con un servicio liderado por los Villa Ambassadors del resort. El refugio perfecto para las parejas en busca de intimidad que deseen descubrir el significado de la verdadera desconexión, estará en la Calle del Mar, con sus exclusivas estancias adults-only.
Para los amantes de la gastronomía, el hotel también es un referente a nivel culinario con la próxima reapertura de sus restaurantes estrella Michelin, MB dos estrellas - en manos de los chefs vascos Erlantz Gorostiza y Martin Berasategui y el restaurante japonés Kabuki una estrella - con David Rivero como máximo responsable. El Mirador de César González o Txoko también son excelentes alternativas para disfrutar de la mejor gastronomía.
Una escapada en pareja, un viaje familiar, trabajar en remoto o simplemente unas merecidas vacaciones son siempre el plan perfecto en este resort que ofrece un sinfín de posibilidades para disfrutar de un verano eterno.
