Algunos parajes como Santa Leocadia y el Purgatorio han pasado de albergar una urbanización de casi 1.000 viviendas y requerir 5.000 mts. para hacer una vivienda, a exigir ahora 50.000 mts.

El pasado sábado en la noche, a pesar de las inclemencias climatológicas, se desarrolló en la sede de Cebag una reunión informativa covocada por Coag y Apese para informar a los propietarios de la Diputación de la Sierra de Totana de las consecuencias que de derivan de la posible modificación del Plan de Ordenación Urbana de Totana (PGMO), requerida por la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) anejo al plan.

El presidente de la Unión de Agricultores informó de que se había invitado a la reunión tanto al Concejal de Agricultura y Pedanías como al de Urbanismo, para que aclarasen a los afectados algunos aspectos del informe de la DIA y de las consecuencias que ello suponía, pero que ambos tenían compromisos esa tarde y no podían asistir.

El presidente de Apese y Cebag, José Luís Hernández, comentó detalladamente con los asistentes los párrafos de los informes de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), a la vez que las consecuencias que se derivaban de ello tanto para la parcela mínima de edificabilidad para vivienda unifamiliar como para la práctica de la actividad agraria, entregando a los presentes por escrito una recopilación de las modificaciones referidas y sus consecuencias.

Según comentó el presidente de Apese, las modificaciones del plan son tan importantes que suponen que, en parajes como el Purgatorio y Santa Leocadia se pasa de la previsión de una urbanización con casi 1.000 viviendas y  una normativa que exigía 5.000 m2 para construir una vivienda unifamiliar, a descartar la realización de esa urbanización y a exigir 50.000 m2 para posible edificación de una vivienda unifamiliar.

Los asistentes acordaron firmar dos escritos dirigidos a los Consejeros de Medio Ambiente y de Ordenación del Territorio por un lado y al presidente de la Junta Rectora del Parque por otro, en los que respectivamente se solicita la retirada del Plan de Ordenación Urbana (PGMO) de Totana y la segregación y aprobación del casco urbano; mientras que por otro lado se hace una muy dura valoración de la gestión del Parque de Sierra Espuña- cuya copia se prevé enviar a todos los órganos nacionales e internacionales relacionados con este espacio natural-, en que se responsabiliza a los gestores de la desastrosa gestión del parque y del incumplimiento de su normativa a la vez que se denuncia la ampliación encubierta que se quiere hacer en una perímetro de 1.000 mts. del parque , en tanto que la expropiación de derechos de los propietarios del entorno con la coartada de unos supuestos valores ambientales que han sido ignorados en otras zonas y municipios colindantes con el parque como Aledo.

Según coincidieron varios de los asistentes, desde la Dirección el Parque de Sierra Espuña se esta provocando con sus incumplimiento y sus pretensiones de ampliar de hecho el perímetro del Parque, una animadversión creciente de los propietarios del interior y entorno exterior del parque que podrían pasar de ser sus principales protectores y juardas  sin sueldo, a considerar el parque como la causa principal de sus problemas.

El próximo viernes día 3, e las siete de la tarde, se celebrará una reunión con los afectados de la zona de Mortí y Trasvasse, en la parte sur del Parque de Sierra Espuña en el término de Totana.