Hasta el momento, se ha esclarecido una quincena de delitos
La Benemérita se ha incautado de herramientas utilizadas en los robos y ha recuperado parte de los efectos sustraídos
La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado en Torre Pacheco la operación 'Garasi', una investigación iniciada para esclarecer un elevado número de robos en vehículos, que ha culminado con la desarticulación de un grupo delictivo y la detención de sus tres integrantes como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, robo con fuerza en interior de vehículos, hurto y uso fraudulento de tarjeta bancaria.
Durante la operación, los guardias civiles se han incautado de herramientas utilizadas en los robos, han recuperado parte de los efectos sustraídos y han esclarecido, hasta el momento, una quincena de delitos contra el patrimonio, aunque no se descarta que esta cifra pueda aumentar.
Las actuaciones se iniciaron el pasado mes de abril, cuando la Guardia Civil detectó un incremento de robos con fuerza cometidos en el interior de vehículos que se encontraban estacionados en los aparcamientos comunitarios de edificios del municipio pachequero.
Efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita abrieron la operación para investigar y esclarecer los hechos delictivos, que, además, habían originado alarma social entre los vecinos.
Los primeros pasos de la operación se desarrollaron en dos sentidos. Inicialmente se practicaron exhaustivas inspecciones técnico-oculares en los lugares de los robos para recabar todos los indicios posibles y, además, se realizó la búsqueda de efectos sustraídos para detectar su comercialización y así fijar su trazabilidad hasta los delincuentes.
Las pesquisas practicadas permitieron a los guardias civiles del Área de Investigación de Torre Pacheco comprobar que tras los robos se encontraban un grupo delictivo organizado y jerarquizado, con distintas funciones definidas.
Su actividad delictiva iniciaba con una búsqueda de futuros objetivos, que eran vehículos estacionados en edificios y otras comunidades de propietarios de considerable volumen de viviendas y por ende de vehículos.
Para ello, durante el día y con cierta discreción para evitar ser detectados, comprobaban los accesos de los edificios del casco urbano de Torre Pacheco, para determinar cuáles quedaban mal cerrados y podrían acceder a ellos con posterioridad.
Una vez seleccionados estos últimos, durante la noche, accedían a los aparcamientos de los edificios, donde, con mayor facilidad que si lo hiciesen en la vía pública, cometían los robos en el interior de los vehículos empleando la fuerza.
En estos robos se solían sustraer objetos generalmente de poco valor, como documentación, piezas de joyería y relojes, efectivo y otros complementos personales, así como tarjetas bancarias. La mayoría de ellos se vendían a terceras personas y las tarjetas se utilizaban para realizar compras en comercios.
Fruto de la investigación, los guardias civiles identificaron a los tres integrantes del grupo delictivo, todos ellos con un amplio historial delictivo a sus espaldas. Entre ellos había dos varones que recorrían la localidad en horas diurnas para seleccionar los objetivos y posteriormente, durante la noche, materializaban los robos.
La tercera integrante del grupo delictivo era una mujer que tenía asignado el rol de realizar labores de vigilancia en los exteriores de los edificios durante la comisión de los robos y de dar salida a los objetos robados.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, la Guardia Civil diseño un dispositivo de vigilancia en el municipio para localizar a los sospechosos. En uno de estos dispositivos, los investigadores sorprendieron a los integrantes del grupo delictivo, justo después de cometer un robo con fuerza interior de vehículo que se encontraba en la vía pública al que habían fracturado una de sus lunas.
Dos de ellos fueron detenidos in situ, pero el tercer sospechoso huyó a pie del lugar y fue localizado y detenido poco después, todos como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, robo con fuerza en interior de vehículos, hurto y uso fraudulento de tarjeta bancaria.
Durante las detenciones, entre sus pertenencias, los guardias civiles encontraron objetos robados en diferentes vehículos que fueron devueltos a sus legítimos dueños, en unión de un rompe vidrios y dos linternas, medios usados para el desarrollo de su actividad delictiva.