El pueblo de Torre-Pacheco volverá a disfrutar en breve del que fuera uno de los mayores símbolos de identidad del municipio: la torre de su iglesia, aquella, que según los mayores, era como un faro que se alzaba enhiesto en mitad del campo de Cartagena. Por este motivo el Ayuntamiento ha firmado un convenio con la Diócesis de Cartagena para culminar el proyecto de construcción de la nueva torre-campanario, ya que la anterior fue derribada en los años 70. El convenio tiene un importe de 500.000 € y fue firmado por el Alcalde de Torre-Pacheco, Daniel García Madrid, y por el Obispo de la Diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca Planes. Se espera que las obras estén terminadas para el 7 de octubre, día de la patrona de Torre-Pacheco, la Virgen del Rosario y que está torre sea inaugurada por el Obispo.
En 1971 el pueblo de Torre-Pacheco, tras no conseguir por parte de la Dirección General de Bellas Artes la declaración de monumento histórico artístico para su Iglesia de más de tres siglos de antigüedad, asistía a la demolición del templo, por orden de un Obispado que adujo razones pastorales. La mitad del pueblo se dividía, entre los que estaban de acuerdo con la demolición y los que no. Posteriormente se levantó la Iglesia actual pero en el proyecto no fue incluida la construcción de una nueva torre.
En el año 2002 la Diócesis de Cartagena, a través de la Parroquia Ntra. Señora del Rosario de Torre-Pacheco decidió convocar un concurso de ideas para la selección por parte de un jurado de un estudio que definiera la nueva torre de la Iglesia Parroquial junto al emplazamiento de la Iglesia actual, con motivo del IV Centenario de la Parroquia. Este concurso tenía como fin principal el dotar a la localidad de la torre que históricamente identificó el municipio que con el paso del tiempo y una intervención humana bastante desafortunada desapareció injustificadamente del paisaje urbano.
La nueva torre contará con un innovador diseño. De día, el resultado será una geometría sencilla pero rotunda, un volumen prismático y continuo en altura, diferenciándose de la Iglesia, con formas escarpadas y decrecientes, con el objeto de que ambos volúmenes queden resaltados. El material empleado serán bloques de gran tamaño de piedra del Cabezo Gordo, alabastro (material en el que está elaborada la Virgen del Pasico) en la parte superior y vidrio transparente en la parte más alta, donde se verá la maquinaria antigua de un reloj.
De noche, la torre se verá como un halo de luz interior que comenzará a manifestarse sensiblemente con los primeros despieces de alabastro y conforme este pierda grosor irá aumentando su luminosidad hasta llegar a la transparencia total del vidrio, continuándose en vertical hasta difuminarse en el cielo.
La implantación física de la torre en la plaza se aprovechará para crear un pavimento de vidrio en el que exponer todas las piezas de valor conservadas de la antigua Iglesia desaparecida, restauradas recientemente por el Ayuntamiento para realizar la exposición “El legado del Deán”. Las campanas originarias se reubicarán en la torre, una vez restauradas.