Se formó en la escuela del actor de Valencia en 2017. Descubrió a Rubén Sánchez, cuando él era un estudiante de cine, en un casting en Barcelona.
Ahora está trabajando de la mano, de uno de los productores musicales, con más renombre en el panorama musical. Tras rodar Lamento, Gisela, se embarcó en un viaje hacia Madrid, siendo su actual ciudad de residencia, para buscarse y formarse un gratificante futuro en el mundo de las artes y la interpretación. Fue elegida para continuar su formación, en la Joven Compañía.
Donde actualmente, está cursando su formación como actriz. Pero no solo tiene talento para el cine, sino qué, la música es su otra pasión.
Hecho que le ha llevado a que, el reconocido productor musical, Jesús Yanes, quien ha producido música para artistas como Alejandro Sanz, Malú, Paco de Lucía, Mónica Naranjo o Bisbal y que vio en ella, un talento excepcional y quiera apostar por su carrera musical. Gisela tiene muy claro, sus objetivos, poder llegar a vivir del mundo del arte y la interpretación, ella misma sabe que no es fácil, no obstante nunca se rinde, ya que su desparpajo y carácter, único, la hace ser una mujer muy vital y con muchas metas por cumplir. Madrid le ha abierto las puertas, la gran ciudad, donde ella se siente una mujer libre, con ganas de conocer a otros actores y actrices y poder hacerse un nombre en la industria del cine.
Vive en el barrio de los artistas, Malasaña. Donde cada viernes, se reúne con grupo de actores y artistas, y van a charlar y comentar la jornada en Plaza dos de Mayo. Lamento, ha sido, hasta el momento, su gran producción de cine, no obstante dentro de poco, podremos contemplarla en otras producciones.
Ya que, es muy trabajadora y seguro que enamorará a las directoras de casting. Su papel en Lamento, era muy opuesto al de Sara Jiménez.
Muy acorde con su personalidad.
Una chica arrolladora Que siente deseo por hombres, pero donde ella es la dominante. Gisela tiene una gran amistad con el director, y sabe muy bien, como Rubén Sánchez, dirige y quiere trabajar.
Es de ahí, que ella tuvo mucha libertad para crear su propio personaje en Lamento. Y lo podremos disfrutar en los festivales. Ella, no tiene metas, vive el momento.
Defensora de los derechos de la mujer, feminista y reivindicativa, para hacer un mundo mejor. Es una mujer luchadora, que no lo ha tenido fácil, sin embargo, nunca se ha rendido. Sus ganas de ser actriz, le vino, como meta para superar el acoso que recibió por parte de algunos excompañeros, entre la infancia y la adolescencia.
Qué llegaron anular su autoestima. No obstante su fuerza emocional, le dieron el empujón, de salir de un agujero negro, recomponerse y valorarse como personal.
Pensando antes en ella, que en lo que piense la gente. Esta fuerza, es la que cada día, la motiva en su trabajo. Y tener ese amor hacia el cine. Porque para ella, el cine es un arte de expresión, de imaginación y de poder producir un personaje que muchas veces, nos encantaría ser. Gisela Ruíz, anima a todo el mundo, a ver lamento. Ya que es una producción muy importante para combatir la violencia sexual.
Que por desgracia muchas mujeres han vivido y Gisela puede afirmar que es una de ellas.