Los hombres son los que más cuidan su imagen durante el confinamiento con yatepeino

Los servicios de barbería, corte de pelo de hombre y mujer o aplicación de color son los más demandados por sus clientes 

Gracias a la startup española es posible contratar a un profesional de la peluquería o belleza a domicilio para cuidar la imagen e higiene personal y así mantener una alta autoestima durante el confinamiento.

Profesionales y clientes deben cumplir las medidas de seguridad e higiene establecidas para evitar un posible contagio del virus COVID-19.

Cuidar la imagen y la higiene personal es una estrategia de salud recomendada por los psicólogos para mantener un estado de ánimo positivo durante la situación de confinamiento que se vive en España. Asearse, vestirse y arreglarse son pautas saludables imprescindibles para garantizar el bienestar de la población en situaciones como la actual. De hecho, los expertos coinciden en que arreglarse no es solo una cuestión de belleza exterior, también es una cuestión de salud mental. Tanto para la población femenina como para la masculina.

En yatepeino, plataforma que presta servicios de peluquería y belleza a domicilio desde 2017, son conscientes de que esta situación de confinamiento no debe ser un impedimento para cuidar el aspecto personal. Sobre todo porque los profesionales de la actividad de peluquería a domicilio sí pueden prestar sus servicios según refleja el artículo 10.1 del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declaró el estado de alarma para al gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19.

Por lo tanto, los profesionales que integran la plataforma pueden desplazarse a los hogares y contribuir así a que, entre otros colectivos, las personas mayores, dependientes, con movilidad reducida o con algún tipo de discapacidad mantengan su higiene personal de una manera segura.

Los servicios para los hombres, los más demandados

Según datos de la startup española, los servicios más demandados durante estos días de cuarentena son el arreglo de la barba, el corte de hombre y de mujer y la aplicación de color para mujer. De hecho, desde que se decretara el estado de alarma en España para hacer frente a la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus, han aumentado de forma exponencial las visitas a los servicios para hombres en la web, pasando de un 18% a un 46%. Es más, el corte de pelo masculino supone en torno al 75% de los servicios solicitados a yatepeino.com.

La lectura que se puede hacer de estos datos es que la población masculina también se preocupa por mantener un cabello y barba cuidados y sanos. Una tarea que prefieren encargar a profesionales evitando así la posibilidad de hacerse daño o de terminar con un corte desastroso. Es decir, para no tener que arrepentirse de seguir los consejos de artículos y vídeos que circulan por la red e invitan y muestran cómo llevar a cabo estas tareas. Jesús Olmo, CEO de Yatepeino, ha afirmado que “puede parecer sencillo utilizar una maquinilla eléctrica y cortarse el pelo uno mismo. Pero solo puede serlo cuando la intención es raparse la cabeza completamente”. El problema llega cuando el corte de pelo es algo más laborioso. “Si lo que se busca es lograr un corte de pelo con un estilo y que quede profesional, además de ser una tarea complicada puede provocar cortes, trasquilones y un resultado nada óptimo”, ha añadido Jesús Olmo.

Mantener medidas de seguridad e higiene es prioritario para yatepeino

Preservar la salud de los profesionales y los clientes es clave. Por eso, desde la plataforma se han tomado una serie de medidas de seguridad e higiene que ambas partes deben cumplir antes, durante y después de que se presten los servicios solicitados. El objetivo es evitar cualquier riesgo de contagio innecesario.

Se realiza un seguimiento de la salud de los profesionales que van a prestar los servicios y se les informa de las recomendaciones y obligaciones establecidas por parte del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social y la Organización Mundial de la Salud (OMS). Algunas de esas pautas son lavarse manos con agua y jabón antes y después de realizar el trabajo, utilizar mascarilla quirúrgica y guantes y utilizar gel desinfectante. “Obligamos a que los profesionales utilicen capas de corte o toallas desechables o, como medida alternativa, utilizar una bolsa de basura como capa”, ha explicado el CEO. Además, para ayudar a evitar la propagación del virus COVID-19, se les exige desinfectar todos los materiales que utilicen antes y después de cada servicio.

Los clientes también deben tomar algunas medidas. En primer lugar, se les pregunta si en el domicilio se encuentra alguna persona que haya dado positivo por COVID-19, si tiene alguno de los síntomas o si ha estado en contacto con algún caso confirmado o con síntomas. Según Jesús Olmo, “en algún caso el cliente ha querido que el servicio se realizase en una zona común, fuera del domicilio y con medidas higiénicas inexistentes, por lo que rechazamos el servicio”. Aunque este caso ha sido una excepción, ya que “en una situación como la actual los clientes cumplen estrictamente con las medidas de seguridad e higiene que les indicamos para poder realizar el servicio de forma segura”, ha indicado Jesús Olmo.

Una vez confirmado que ninguna persona que se encuentra en la vivienda está en cuarentena y que tanto los profesionales como el cliente han dado su consentimiento a la prestación del servicio, se les indica a los clientes que deben seguir un protocolo de higiene y seguridad para evitar posibles contagios:

· Solamente el cliente debe encontrarse en la habitación donde se va a ofrecer el servicio de peluquería o belleza. En el caso de ser una persona con movilidad reducida, discapacidad o casos justificados, sí se permite un acompañante pero éste debe guardar la distancia de seguridad si la situación lo permite.

· El cliente –y su acompañante– debe disponer en su vivienda de mascarillas de protección, guantes y gel desinfectante. Además, debe lavarse las manos justo cuando llega el profesional a la vivienda.

· No debe existir ningún contacto físico entre el profesional y las personas que se encuentren en la vivienda.

En caso de que el cliente o el profesional, encontrándose ya en el domicilio donde se vaya a prestar el servicio, considerasen que no se reúnen las condiciones de salud e higiene anteriormente descritas, se desistirá del servicio. Del importe abonado, se devolverá el 75%, quedando el 25% restante destinado a cubrir los gastos de desplazamiento del profesional.