La plaza ofrecerá dos espacios diferenciados: una zona verde, que servirá como barrera vegetal frente a la carretera, y una gran explanada, próxima al templo
El próximo lunes, 17 de julio, comenzarán las obras de remodelación de la plaza del Cura González de Santomera, más conocida como "Plaza de la Iglesia". Asimismo, también empezarán en las aledañas calles Fernando Giner, del Cine, Fuensanta, José Espinosa e Iglesia. María Tornel, portavoz del Equipo de Gobierno, explica que "los trabajos previstos por el Ayuntamiento permitirán que toda la ciudadanía de nuestro municipio disfrute próximamente de este entorno como un espacio más accesible, amplio y agradable, con más zonas verdes y mejores infraestructuras de pavimento, alumbrado, saneamiento y abastecimiento de agua potable".
Los trabajos necesarios para llevar a cabo esta remodelación se prolongarán durante un tiempo aproximado de cuatro meses. "Somos conscientes de que, mientras tanto, los vecinos tendrán que soportar algunos inconvenientes -declara Tornel- pero desde el Ayuntamiento nos esforzaremos para que las molestias sean lo más livianas posible".
En esta línea, la portavoz añade que el Consistorio municipal se pone a disposición de todos los habitantes para resolver las dudas que puedan tener al respecto de estas obras. La plaza quedará dividida en una zona verde, que servirá como lugar de esparcimiento y barrera de arbolado ante la contaminación atmosférica, sonora y visual de la adyacente carretera de Alicante (N-340). El otro espacio, más próximo al templo, ofrecerá un lugar más despejado y conveniente para el tránsito peatonal, el encuentro vecinal, las procesiones de Semana Santa o las ofrendas a la patrona, entre otras celebraciones.
Vegetación autóctona y espacio accesible
La plaza mantendrá toda la vegetación de la que dispone en la actualidad, pero se modificará la disposición de los parterres, sustituidos donde proceda por alcorques. Además, se plantarán nuevos árboles, arbustos, tapizantes y aromáticas, todos de especies autóctonas, típicas de la huerta murciana. Se construirá además un nuevo parterre en uno de los laterales del templo y se rectificarán las pendientes para encauzar las aguas pluviales hacia la masa verde, como estrategia de drenaje sostenible, para aliviar los problemas de humedad que afectan a las viviendas colindantes.
La eliminación de barreras arquitectónicas y la instalación de nuevo pavimento, con direccionales y botoneras para personas invidentes, permitirá mejorar también la accesibilidad. También se destacará el contorno de la iglesia, simulando el efecto de una alfombra, lo que contribuirá a embellecer el entorno. De esta manera, el templo ganará presencia igualmente gracias a un juego de perspectivas que focalizará la mirada hacia la entrada de la iglesia.
El presupuesto de esta obra asciende a 528.021,86 euros, cantidad asumida a partes casi iguales por el Ayuntamiento (257.443,86 euros) y la Comunidad Autónoma (270.578), a través del Plan de Obras y Servicios 2022-2023.