Tres son las cuestiones que consideramos han sido resueltas con perjuicio para los Pinatarenses en los últimos días por el Gobierno Municipal, y que son las siguientes:

En primer lugar, en la sesión extraordinaria de Pleno celebrada el pasado 25 de Marzo, se aprobó una derrama de 717.404,79 €, cuya factura, a pesar de presentarse ahora, corresponde al ejercicio 2010, y al parecer fue producida por las importantes fugas que las obsoletas cañerías de plomo y de fibrocemento que aún existen en nuestra localidad.

Desde DPI opinamos que, si bien es cierto que se deben afrontar por tenerlo así acordados los desequilibrios económicos que sufren las empresas concesionarias, no es menos cierto que en el momento del contrato se hubo de tener en cuenta la situación de nuestras instalaciones, y se pudo negociar con la empresa el cambio de las citadas tuberías que habrían evitado el referido desembolso.

Al parecer las pérdidas se agudizaron en torno al año 2007, coincidiendo con la puesta en marcha de la desaladora, a la que tampoco se le exigió responsabilidad alguna, ni colaboración para la mejora de esas cañerías, que en teoría no estaban preparadas para recibir ese tipo de agua desalada, que acrecentó las pérdidas y en parte ha motivado la factura que ahora pagamos todos los Pinatarenses.

Es importante señalar que el punto Séptimo del contrato firmado con AQUALIA recoge que será responsabilidad de la empresa el mantenimiento en buen estado de funcionamiento del conjunto de las instalaciones de abastecimiento de agua, el saneamiento y depuración de las aguas, la búsqueda, localización y reparación a su costa de escapes y fugas, la limpieza de todos los conductos de la red, por ello y por no haber estado presente en las negociaciones, no entendemos el pago de tan alta cuantía, pero así son y funcionan las mayorías absolutas.

En segundo lugar, recordaremos la reforma del contrato de recogida de residuos sólidos con la nueva empresa que tuvo lugar en el Pleno Ordinario del mes de Marzo, donde tampoco se dio participación a los grupos de la oposición a pesar de la trascendencia del contrato, que ha sido sustancialmente mejorado y es aquí donde queremos hacer más hincapié para que con un seguimiento y con la participación de toda la ciudadanía consigamos que la limpieza y lavado de los contenedores se lleve a efecto en periodos cortos durante la temporada estival, para evitar los malos olores, y con la frecuencia precisa para su total higiene el resto del año.

La tercera cuestión que denunciamos está relacionada con la misma empresa y el mismo contrato. Se trata de la recogida de los muebles y utensilios desechados por los vecinos, que aunque se recogen cada quince días, esta Semana Santa ha sido la nota discordante que nuestro Municipio ha ofrecido a nuestros visitantes, sin que ni desde la empresa ni desde la concejalía hayan caído en la cuenta de evitar esa pésima imagen, con una batida extraordinaria que no hubiese supuesto más de dos horas de un camión y dos empleados para solucionarlo.

Esperamos y deseamos que la gran afluencia de visitantes que hemos tenido y que se ha debido en gran medida a la benignidad de la climatología, sirva de preludio para un buen verano, y no tengan excesivamente en cuenta esos fallos garrafales que tanto perjudican la imagen turística de cualquier localidad.

Una vez más queremos poner de manifiesto la disponibilidad de los concejales de DPi para cualquier colaboración que se nos encomiende, ya que como ponen de manifiesto los hechos, todo es mejorable.