La Policía Local ha puesto en marcha un servicio de patrulla de paisano en parques, paseos y zonas urbanas concurridas, con el objetivo de hacer cumplir las ordenanzas municipales que prevén sanciones a los propietarios de perros que no recojan los excrementos de sus animales de la vía pública.

Las numerosas quejas de ciudadanos recibidas en el Ayuntamiento de San Javier en este sentido, y el deber de garantizar la seguridad de los vecinos y la higiene urbana, son el objetivo de esta iniciativa que hasta el momento ha dado como resultado 8 sanciones a propietarios de perros que fueron pillados "in fraganti" por los agentes, sin recoger los excrementos de sus animales en parques y plazas del municipio.

La multa por este motivo asciende a 60 euros, y se trata de una zona de parque infantil o playa a 90 euros. La necesidad de sorprender al propietario del animal en el momento de la acción sancionable motivó la puesta en marcha de la vigilancia aleatoria con agentes de paisano.

Recientemente se realizó una campaña de concienciación por parte de la concejalía de Medio Ambiente, que colocó 5 pipicanes a lo largo del paseo marítimo de Santiago de la Ribera, uno de los puntos de mayor presencia de animales de compañía, para que los propietarios puedan depositar fácilmente los excrementos de sus animales.

Los agentes también controlarán el cumplimiento de otros aspectos de la Ordenanza Municipal sobre Protección y Tenencia de Animales de Compañía, como los referidos a las razas peligrosas cuyos propietarios deben disponer de la licencia que se obtiene en el Ayuntamiento de San Javier, llevar a sus perros con correa, y bozal en aquellos calificados como potencialmente peligrosos.

Los animales de compañía tampoco podrán entrar a las zonas de juego infantiles de los parques públicos. En los jardines públicos no podrán circular por las zonas ajardinadas con césped o similar, sino por las calles de paseo previstas en el diseño del jardín.