Los fármacos para la deshabituación tabáquica serán financiados por el Sistema Nacional de Salud (SNS) a partir del próximo 1 de enero. Así lo ha trasladado la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, al presidente del Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo (CNPT), Andrés Zamorano.
La vareniclina y el bupropion se incluirán en la prestación farmacéutica, tras el acuerdo alcanzado en la Comisión Interministerial de Precios y la resolución del Ministerio. "El tabaquismo constituye el principal problema de salud pública prevenible en los países desarrollados siendo un factor determinante de numerosas patologías y la primera causa de mortalidad y morbilidad evitables en nuestro país y el resto de los países de nuestro entorno", ha explicado Carcedo.
Se estima una media de 51.870 muertes prematuras al año atribuibles al tabaco en España. La tendencia actual muestra una disminución en el caso de los hombres frente a un aumento en las mujeres. En este último caso, las muertes por cáncer de pulmón se han duplicado en los últimos veinte años.
Estrategia integral
La ministra ha recordado que el Ministerio lidera una estrategia integral para disminuir el consumo del tabaco en España trabajando, conjuntamente con las comunidades autónomas, en la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS). Y ha subrayado que "la financiación de la vareniclina y bupropion supone una herramienta de apoyo en los programas de deshabituación tabáquica que se están desarrollando".
Su prescripción se producirá bajo receta electrónica en pacientes que estén incluidos en un programa de apoyo individual y/o grupal y cumplan los criterios establecidos: tener motivación expresa de dejar de fumar constatable con al menos un intento en el último año, fumar diez cigarrillos o más al día y tener un alto nivel de dependencia, calificado por el test de Fagerström ≥ 7.
El SNS financiará un intento anual por paciente para dejar de fumar. Cada prescripción se realizará por un envase, lo que equivale a un mes de tratamiento. Tras ello, el médico, en el marco del seguimiento del programa de deshabituación tabáquica, deberá valorar la evolución de la efectividad del tratamiento con carácter previo a la emisión de la siguiente receta. El tratamiento completo tiene una duración de doce semanas.
Con esta medida se pueden beneficiar alrededor de 83.800 personas, con un impacto presupuestario estimado de 7,9 millones de euros en el primer año.
El coste del tratamiento día será de, aproximadamente, 2,19 euros por persona en el caso de la vareniclina y de 0,66 euros/día en el caso de bupropion. Si consideramos a una persona con una aportación farmacéutica del 40%, su aportación sería de 0,87 euros/día en el caso de la vareniclina y 0,26 euros en el caso del bupropion.
En vareniclina se producirá una disminución del 30% del precio actual del medicamento y en bupropion del 66% (formato mensual). Cabe resaltar que esta disminución de precio se mantendrá cuando la ciudadanía adquiera estos medicamentos fuera de la financiación.