Señalan los riesgos ambientales y la pérdida de la calidad de vida y el bienestar de la ciudadanía. Se solidariza con las movilizaciones vecinales y con la plataforma Stop Biogás.
Ecologistas en Acción se ha dirigido al Ayuntamiento de las Torres de Cotillas y a la Dirección General de Medio Ambiente, mostrando su oposición a la futura instalación de una macroplanta de biogás en el municipio torreño.
Señalan el sobredimensionamiento de estas instalaciones, y los riesgos ambientales y de salud pública derivados del funcionamiento de la planta en las cercanías del entorno urbano, que significará una merma en la calidad de vida y el bienestar de los ciudadanos/as.
El continuo trasiego de vehículos pesados con diferentes tipos de residuos (purines, estiércol, cadáveres en descomposición, residuos agrícolas, etc.) aumenta los impactos ambientales de este tipo de instalaciones y el crecimiento insostenible de esta actividad industrial, así como los riesgos de incidentes o accidentes por un malfuncionamiento, fallos, o ruptura de la estanqueidad de las naves.
Ecologistas en Acción critica la pasividad del Ayuntamiento de las Torres de Cotillas que, desde el primer momento, se ha posicionado del lado de la planta de biogás y no de parte de los intereses generales de los torreños y torreñas.
La organización quiere mostrar su solidaridad con lucha de la ciudadanía de la Torres de Cotillas, por la defensa de su calidad de vida y el derecho a un medio ambiente sano, y en especial con la plataforma Stop Biogás.
Ecologistas en Acción ya viene alertando de la ampliación y el crecimiento desordenado de estas plantas en nuestra región, con el aumento del riesgo de sus impactos, afecciones y efectos acumulativos y sinérgicos en nuestro territorio.
Se necesita un cambio radical de las instituciones públicas en el control de estas explotaciones, una crítica rigurosa a la demagogia de una parte del sector ganadero e industrial, y la apuesta por otro modelo en el que prime la sostenibilidad, minimizando riesgos y afecciones ambientales.
Para ello, la organización ecologista reclama al gobierno regional un Plan de Control de Plantas de Biogás y Metano en la Región, que limite su crecimiento evite la instalación en las cercanías de entornos urbanos y elimine los riesgos de contaminación y malos olores.