El Centro Párraga, del Instituto de las Industrias Culturales y las Artes, muestra desde mañana viernes la exposición 'Odradek, o cuando las cosas tenían puntas', de la artista Ana Martínez, en la que la creadora murciana continúa su trabajo de investigación sobre la dimensión activa pero invisible de las cosas, buscando mostrar al espectador que los objetos que le rodean y que le pasan prácticamente desapercibidos pueden marcar su devenir.
La exposición arroja nueva luz acerca de esta potencia latente que habita en los objetos. Así, la artista trabaja con un conjunto de cosas que de un modo u otro siempre se encuentran ligadas a su biografía, ya sean heredadas, encontradas o regaladas, y sobre las que vuelve una y otra vez, dibujándolas por separado o en conjunto, ensamblándolas unas con otras, documentándolas fotográficamente o trazando detalladamente sus perfiles, como si cada vez que intentara aprehenderlas reparara en algo súbito e inesperado, como si fuera imposible agotar su potencia.
Con esta labor, los objetos pasan a ser fragmentos condensados de historias, memorias y vidas singulares y compartidas. El director general del Instituto de las Industrias Culturales y las Artes, Manuel Cebrián, visitó el montaje de la exposición e indicó que "mientras que la tendencia actual desestima el poder vinculante que tienen los objetos, Ana Martínez parece que quiere festejar su existencia marcando su relevancia".