Cuando anochece el 2023 y las tinieblas van posándose sobre lo acontecido en este desdichado año; cuando tristezas, penumbras humanas y bolsillos harapientos gritan por sus desdichados rumbos que nuestra España se ha visto envuelta por cuatro fantasmas mal avenidos de calamitosos augurios; cuando la madre Europa está haciendo caso omiso de sus hijos españoles que vaguean por sus calles con cabezas cabizbajas, hemos de hacer balance de este 2023 plagado al estilo de los síntomas de Justiniano: ojos sanguinolentos junto a grandes fiebres y pústulas, donde las personas, después de un largo periodo de confusión mental, solían morir con rapidez en pocos días. La libertad, tema clave de un país que ha vivido y ha sido un gran benefactor de la misma, hoy día está más que alicaída y al mismo tiempo esperanzadora.
Unos estamos amordazados por las leyes que salen del Sancta Sanctorum del Congreso Español y, otros, por los estipendios de rica miel con subvenciones de ida y vuelta donde la "Voz de su Amo" es el que sale ganando. ¿No habrá en España un The Washington Post , diario estadounidense, que llevó a Richard Nixon y su escándalo Watergate a los mundos de la Justicia? ¿No existen reales suficientes para la unión de prensa, radio y TV en poner a cada uno en su lugar correspondiente? Aquí no hablamos solo de la Moncloa. Son muchas las Comunidades Autonómicas que también saborean tales mermeladas.
Se ha oído comentar que dos factores son los que pesan en tales situaciones: uno sería el populismo, donde se invita a las personas a pisotear los derechos de las minorías, y otro, las políticas identitarias, donde se pretende que las personas confundan la crítica a sus argumentos con ataques contra ellas mismas. Este circulo de ultraje conlleva el riesgo de provocar que gente de buen talento termine apartándose de la vida pública. Y nos podemos cuestionar ¿Por qué desearía una joven someter su vida bajo la mirada pública, cuando una discusión o una broma de mal gusto pueden acabar con su carrera? Hoy día en España existe un inminente peligro de que las personas preparadas para entrar en la vida pública sean solo una rara colección de ideólogos dispuestos a sacrificarlo todo por la causa, provocadores que se ganan la vida con la indignación y otros "insípidos" que no tienen nada interesante que decir.
Ya hemos oído de buenos medios, pocos por desgracia, los que proponen unos principios de actuación ante tales mareas." El derecho a enunciar una opinión razonada debe prevalecer sobre el derecho, por ejemplo, a no sentirse ofendido. El derecho a expresarse, sin embargo, no incluye el de incitar a la violencia, pero sí el de manifestar opiniones fuertes sobre asuntos controvertidos". Otra cuestión paralela a esta es cuando ciertos medios, aupados económicamente por empresas, partidos políticos o personas de cierta prestancia económica, que apoyan de manera generosa a los medios, ya sea por publicidad u otras, dejan más que claro a sus profesionales que en el momento que saques a tal o cual, ipso facto, dejamos en invertir en ti. Y esto, por lo visto, no solo pasa en Moncloa, también pasa en la Región de Murcia. En todos lados se cuecen nueces, pero por lo visto, las nueces de nuestra Región son de tamaño considerable.
Todos los partidos políticos de una nación o comunidad autónoma han de ser medidos con el mismo rasero. El acoso a la ética y moralidad, a la verdad, al mundo de la razón no solo priva la oportunidad de escuchar un rango de opiniones. También priva a la tarea de tener que discutir con personas de tradiciones intelectuales alternativas. Con ello, si al final, la gente rechaza implicarse en el debate político porque teme ser victima de una turba aulladora, por prensa-radio-televisión que busca solamente otros armazones, la democracia puede morir. Los organismos públicos, especialmente las universidades, necesitan dar lo mejor de sí para defender los derechos de los pensadores contrarios, lo que siempre hemos ansiado: la crítica constructiva.
Esperemos que las doce uvas de noche vieja, las uvas de la suerte, este año, en vías del 2024 hagan su efecto y tanto unos como otros sean profesionales de su hacer y dejemos los suburbios baratos, la compra y venta, envidias, egos y rabias mueran en el cruce de caminos entre el 23 y el 24.
A todos Ustedes: feliz nochevieja y feliz 2024.
VALORES REGIÓN DE MURCIA
