Piden que se establezcan nuevas zonas de anidamiento cercanas, que puedan albergar las importantes colonias de vencejos, murciélagos y otras aves
Las organizaciones ANSE, Ecologistas en Acción, SEO Birdlife y SOS Vencejos Murcia han remitido un escrito a la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor a raíz del inminente derribo del Edificio Lagomar en La Manga, que ha permanecido cuarenta años a medio construir.
Esta circunstancia ha tenido como consecuencia que varias especies de aves y quirópteros hayan podido establecer colonias muy numerosas, aprovechando el refugio que les brindaba la estructura, ausente de actividad humana.
Entre las especies identificadas por las organizaciones se encuentran varias aves como el vencejo común, el vencejo pálido, la golondrina común, el cernícalo vulgar, o el estornino negro, además de quirópteros como el murciélago común y el murciélago hortelano.
Algunas de ellas son vulnerables, como los murciélagos, y otras, como los vencejos, son especies migradoras cuyas poblaciones están decreciendo, y por tanto sus nidos y crías están protegidos por la legislación vigente.
Por todo ello, y teniendo en cuenta que el Mar Menor es Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), las organizaciones consideran imprescindible la adopción de una serie de medidas que garanticen la continuidad de las colonias afectadas, como son:
Evaluar el impacto ambiental del derribo teniendo en cuenta la afección a estas especies, y las consecuencias para la salud pública en la zona. Recuerdan que muchas de ellas son insectívoras y mantienen a raya las poblaciones de mosquitos, por ejemplo.
Evitar, en la medida de lo posible, la destrucción de aquellos nidos que puedan preservarse en la zona, en cumplimiento de la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, así como la Ley 7/1995, de 21 de abril, de fauna silvestre de la Región de Murcia, y de las restricciones asociadas a la inclusión de especies en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESRPE) o en el Catálogo Español de Especies Amenazadas (CEEA).
Siendo la principal demanda, la adopción de medidas correctoras adecuadas, que permitan reubicar en el entorno más cercano a estas colonias, ofreciéndoles nuevos espacios de nidificación y refugio, adaptados a las necesidades de cada especie.
Además, las cuatro organizaciones ambientales piden a la administración regional que realice campañas de educación ambiental, remarcando la importancia de la biodiversidad y los beneficios que nos aportan estas especies, asegurando una mejor acogida de las medidas correctoras por la población.
Para terminar, consideran que en un entorno tan urbanizado e inhóspito como La Manga, sería necesario aprovechar estos espacios que quedan libres, para renaturalizarlos con vegetación autóctona, con un claro beneficio ambiental y social.