Las consejerías de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca y de Salud, junto con el Colegio de Veterinarios de la Región de Murcia, presentaron hoy la campaña para promover la vacunación antirrábica y la identificación mediante microchip de los animales de compañía (perros, gatos y hurones). Con esta campaña se pretende concienciar sobre la obligatoriedad de la vacunación y la identificación electrónica animal (microchip), tal como se establece en la Ley 6/2017 de protección y defensa de los animales de compañía de la Región de Murcia.
El consejero, Antonio Luengo, que presentó la campaña junto con el director general de Salud Pública y Adicciones, José Jesús Guillén, y la presidenta del Colegio de Veterinarios, Teresa López, explicó que "los centros veterinarios de la Región de Murcia, como establecimientos sanitarios, desempeñan un papel primordial en la vigilancia epidemiológica de las enfermedades de nuestro animales de compañía, algunas de ellas, zoonóticas".
"Se trata de una acción para la prevención, el bienestar, la salud animal y la salud humana dentro del concepto 'One health' (Una sola Salud), ya que mediante la vacunación se minimiza el riesgo de trasmisión de la rabia, entre nuestras mascotas y a los humanos", explicó el consejero, quien refirió que "existe riesgo epidemiológico debido a posibles casos reportados del norte de África, si bien hasta la fecha no se ha dado en la Región ningún caso de rabia en humanos".
La campaña de vacunación del virus de la rabia se realizará a lo largo de todo el año en la Región en 250 clínicas veterinarias. Asimismo, en ese acto se revisa la desparasitación externa e interna, así como el estado general de salud del animal. La obligación se extiende a los animales de compañía a partir de los 3,5 meses en perros y hurones, y a los 5 meses en gatos.
Del mismo modo, para asegurar el bienestar animal, los propietarios deben mantener unas buenas condiciones higiénico-sanitarias, lo que se traduce en el Plan Vacunal establecido por su veterinario de confianza para garantizar y proteger la salud de las personas y los animales. La rabia es una enfermedad zoonótica, es decir, que se transmite al hombre y que tiene una tasa de mortalidad inasumible por una sociedad moderna.
Por su parte, la identificación electrónica a través de microchip permite llevar un control del censo de animales, evitar abandonos y facilitar la recuperación de los animales perdidos, a la vez que tener un historial clínico del animal.