Han sido detenidos los tres integrantes del grupo delictivo como presuntos autores de delito contra la salud pública y delito de defraudación de fluido eléctrico
El invernadero clandestino, con 120 plantas de marihuana, estaba instalado en una vivienda utilizada solo para el cultivo de cannabis
La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco de los servicios establecidos para prevenir y perseguir el tráfico de drogas, ha llevado a cabo en Las Torres de Cotillas la operación 'Brown', que se ha saldado con la desarticulación de un grupo delictivo integrado por tres personas y dedicado al cultivo ilícito de marihuana.
Las actuaciones se iniciaron el pasado año, cuando, gracias a la colaboración ciudadana, la Guardia Civil abrió la investigación para verificar una serie de pistas relacionadas con la producción de droga en una vivienda del municipio torreño.
Los primeros pasos de la operación permitieron a los efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita ubicar una vivienda en la que, al parecer, existía un cultivo ilícito de marihuana, por lo que se estableció la principal línea de investigación sobre este inmueble y las personas que accedían al mismo.
Los numerosos dispositivos de vigilancia establecidos sobre la vivienda dieron sus frutos, ya que se pudo identificar a tres personas integrantes de una misma familia que presuntamente se encontraban tras la autoría de la actividad delictiva investigada.
También se comprobó que la vivienda solo se utilizaba como punto de producción y manipulación de cannabis y que habían destinado las tres habitaciones de la planta baja a modo de invernadero, una zona totalmente aislada del resto del inmueble, lo que permitía evitar que el olor característico y la constante iluminación se apreciaran desde el exterior.
Durante la investigación los guardias civiles pudieron constatar la existencia de una derivación eléctrica ilegal, para no tener que hacerse cargo del elevado consumo eléctrico que genera este tipo de instalaciones.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, previa autorización judicial, la Guardia Civil efectuó la entrada y el registro de la vivienda objeto de la investigación, donde se halló un invernadero clandestino dedicado al cultivo ilícito de marihuana que, en ese momento tenía en última fase de producción 120 plantas de cannabis sativa.
Además de las plantas de marihuana, los guardias civiles se incautaron de todos los elementos que componían el invernadero ilegal sofisticados dispositivos de riego, iluminación, calefacción y ventilación y un vehículo.
El registro culminó con la detención de los tres sospechosos como presuntos autores de delito contra la salud pública, por cultivo y elaboración de drogas, y de delito de defraudación de fluido eléctrico.
De la investigación realizada se desprende que el grupo delictivo ahora desarticulado tenía una infraestructura para el cultivo ilícito de marihuana con una capacidad de producción anual que rondaría el millar de plantas de cannabis.
Los detenidos, la droga aprehendida, los efectos incautados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Molina de Segura (Murcia).