La Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias, Política Social y Transparencia y el Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad de Murcia (Cermi Región de Murcia) presentaron hoy los resultados del proyecto 'Únicas' en el que participaron 200 mujeres con discapacidad en una decena de talleres, como herramienta enriquecedora tanto para ellas, como para el movimiento asociativo de la discapacidad y también las administraciones públicas.
Los talleres se llevaron a cabo en los municipios de Cieza, Torre Pacheco, Águilas, Lorca, Yecla, San Pedro del Pinatar, Molina de Segura, Cartagena, Murcia y Caravaca de la Cruz.
La vicepresidenta y titular de la Consejería, Isabel Franco, destacó la necesidad de este tipo de iniciativas pues "muchas mujeres han sido capaces de verbalizar aspectos, problemáticas y realidades que no habían expresado antes". En este sentido, resaltó que "las mujeres han ganado así confianza, lo que es un éxito de cara a su vida diaria para que se enfrenten a ella desde una mirada positiva".
También se dio a conocer la puesta en marcha, gracias a la financiación de la Consejería, de la segunda edición de esta iniciativa que en esta ocasión se centra en los derechos de las mujeres con discapacidad. Con el lema 'Dere-Hechos', cuyo mensaje central es que ser mujeres con discapacidad, es ser mujer con derechos, ya se están realizando talleres que en esta edición se amplían a cinco municipios más.
En la Región de Murcia hay 82.000 mujeres y niñas con discapacidad que representan el 51,4 por ciento del total de personas con discapacidad de la Región. "Se trata, por tanto, de un importante número que debemos tener en cuenta y por el que debemos velar", dijo la vicepresidenta.
Isabel Franco, junto con el presidente de Cermi, Pedro Martínez, y la secretaria de Cermi-Mujer, Teresa Lajarín, dieron a conocer los principales asuntos sobre los que las mujeres incidieron en los citados talleres, en los que se habló de familia, sexualidad, visibilidad, apoyos sociales, empleo, sanidad, accesibilidad, ocio inclusivo, vivienda y maternidad.
En cuanto a violencia, se recordó que tal y como desveló el estudio solicitado por la Consejería a la Universidad de Murcia sobre violencia en mujeres con discapacidad, éstas tienen una percepción muy negativa de su imagen y autoestima. Incluso, justificaban el maltrato por ser tan poco favorecidas, declarándose 'mercancía dañada'.
De ahí, destacó Franco, "la importancia de que las mujeres participantes hayan ganado en confianza mediante estos talleres" y de que estas acciones mantengan una continuidad, tanto a través de las asociaciones con discapacidad como de las propias administraciones públicas, para que mujeres y niñas con discapacidad "puedan seguir avanzando y afianzando sus derechos como ciudadanas de pleno derecho que son".