Al valorar los datos de marzo sobre paro en la región correspondientes al mes de marzo de 2022, IUVRM resalta el dato histórico de contratación indefinida impulsado por la Reforma Laboral, así como la debilidad del modelo productivo murciano extremadamente sensible a cualquier síntoma de crisis y que parece agotado en su capacidad de generar empleo.
Murcia. 04.04.2022. La dirección regional de IU-Verdes ha valorado, a través de su coordinador regional, José Luís Álvarez-Castellanos, los datos de paro en la región correspondientes al mes de marzo de 2022, resaltando el dato histórico de contratación indefinida impulsado por la Reforma Laboral y, por otra parte, la debilidad del modelo productivo murciano extremadamente sensible a cualquier síntoma de crisis y que parece saturado en su capacidad de generar mayor empleo.
Álvarez-Castellanos ha insistido en “la importancia del dato de contratación indefinida que ha alcanzado al 30% de los contratos firmados en marzo, dato que hasta hace unos meses apenas alcanzaba el 9% y que llegó a situarse en el entorno del 6% en los años de la recuperación de la crisis financiera (2014-18). Los datos acumulados confirman la tendencia marcada por la Reforma Laboral, situando ya la contratación indefinida acumulada en el 22% en una rápida progresión en contraste con la contratación indefinida del conjunto del año 2021 (9,6%) o la de 2019 (8,6%)”.
Sin embargo, ha destacado el coordinador de IU-Verdes, “el mercado laboral murciano vuelve a sumar una leve subida del paro registrado en un mes en que tradicionalmente baja por la reactivación de la actividad agrícola y el comienzo de la campaña turística de primavera, siendo una de las cuatro CCAA en las que el paro ha aumentado, a pesar del crecimiento de la afiliación a la Seguridad Social que alcanza ya la cifra récord de 623.442 personas afiliadas, dándose un incremento en todos los sectores de actividad excepto en el sanitario y en actividades administrativa donde ha bajado la afiliación”.
Estos hechos demuestran la fragilidad y debilidad del modelo productivo regional, muy sensible a cualquier síntoma de crisis al sustentarse de manera desproporcionada en el sector servicios y el turismo, así como su incapacidad para absorber el incremento de la población activa que se produce a nivel regional.
Desde la formación de izquierda instamos, una vez más, al gobierno regional a impulsar una transición del modelo productivo hacia otro con mayor peso de actividades económicas de mayor valor añadido y mejores salarios como la industria, la investigación o la transición energética. A la vez, es necesario reforzar la posición de los trabajadores/as en la negociación colectiva que promueve también esta reforma laboral con la prevalencia de los convenios de sector y la ultraactividad de los mismos.