Desde el inicio de la pandemia, los centros de día y servicios de promoción de la autonomía personal de la Región, que dan servicio a más de 3.600 personas con discapacidad, han intensificado esfuerzos para continuar prestando atención a sus usuarios. En coordinación con el Instituto Murciano de Acción Social (IMAS), las entidades gestoras de los centros han atendido a las personas con discapacidad adaptando la modalidad de intervención a las distintas situaciones de alerta establecidas por las autoridades sanitarias en cada momento.

Desde la atención telemática, en el domicilio, paseos terapéuticos, acompañamiento en gestiones varias, a la propia actividad presencial en el centro, en grupos reducidos, cuando la situación epidemiológica lo permitía, son las actuaciones que han realizado los centros de personas con discapacidad, manteniendo las medidas de seguridad establecidas desde Salud y recogidas en los distintos protocolos de actuación elaborados de forma conjunta con el IMAS y el Comité de Representantes de Personas con Discapacidad y sus Familias de la Región de Murcia (CERMI).

La modalidad de atención telemática ha permitido continuar trabajando, en sesiones individuales y grupales, en formación ocupacional, atención psicológica, ejercicio físico, en la capacidad de autonomía del usuario, el fomento del contacto en redes sociales y la promoción de competencias personales para hacer frente a las dificultades emocionales e interpersonales.

También se ha recurrido a los medios telemáticos para realizar actividades, juegos interactivos y visitas virtuales a lugares como museos y organismos. Estas iniciativas han contribuido a crear rutinas y trabajar los miedos que han surgido durante la pandemia entre los usuarios.

La directora general de Personas con Discapacidad del IMAS, Conchita Ruiz, destacó "el enorme esfuerzo que han realizado desde el inicio de la pandemia las familias y los profesionales de los distintos centros de atención a personas con discapacidad y servicios de promoción de la autonomía personal de la Región para mantener la actividad con los usuarios, y minimizar los efectos negativos que el confinamiento ha ocasionado en el colectivo más vulnerable".

Desde los centros han establecido indicadores de evaluación y control, unos relacionados con los logros según objetivos establecidos, y otros con indicadores de las actividades que se desarrollan, para evaluar la correcta ejecución de estas.