Miradas que, en los momentos más difíciles de la pandemia, han estado cerca de quienes más lo necesitaban, haciendo posible que la mirada de la educación y la posibilidad de una vida digna sigan presentes en las vidas de miles de niños y niñas
Se acerca la Navidad, un tiempo siempre especial y lleno de alegría, de momentos para compartir y de buenos deseos. Sin embargo, este año nos va a tocar vivir esta Navidad de forma muy diferente. Este año en el que no hemos podido vernos como quisiéramos, que hemos vivido situaciones difíciles, en la distancia, quizás en el dolor, que no hemos podido ver nuestros rostros completos, Entreculturas quiere agradecer a las miradas que han seguido estando ahí a pesar de todo, que han seguido acompañando la misión de Entreculturas, estando cerca de quienes más nos necesitan, haciendo posible que la mirada de la educación siga presente en las vidas de miles de niños y niñas.
Por eso hoy Entreculturas ha lanzado su campaña "Por encima de todo, gracias por tu mirada" para agradecer esas miradas que nos siguen uniendo, nos siguen acercando y acompañando. Miradas que sostienen, que hacen posible que Entreculturas continúe su labor, que siga apoyando a más de 200.000 personas que viven en contextos de refugio, exclusión, pobreza o violencia en 38 países de América Latina, África y Asia.
Vivimos un tiempo difícil que nos invita a reinventar nuevas formas de estar cerca, de acompañar y de crecer. Un tiempo también para no olvidar que, a pesar de todo, la esperanza vuelve a renacer, vuelve a iluminar el mundo y a transformar nuestra mirada, nuestra forma de ver la realidad. "Y es esa mirada que permanece, que continúa a nuestro lado, en este año que termina y que ha sido tan duro y extraño para todos, la que nos ha llenado de confianza y fuerza para seguir trabajando día a día y hacer realidad nuestra misión" explica Raquel Martín, Directora de Comunicación y Desarrollo Institucional de Entreculturas.
Una mirada que nos empuja a mantener el acceso a las oportunidades en mitad de esta crisis educativa global en la que más de 1600 millones de niños y niñas han visto interrumpido su derecho a la educación. Como en Líbano, R. D. del Congo, Guatemala o Argentina, donde, a través de la radio, la educación a distancia, el acompañamiento a las poblaciones refugiadas y el acceso a condiciones de vida digna, Entreculturas sigue haciendo posible que los derechos fundamentales no se detengan.
Una mirada de esperanza en Chad
Junto al Servicio Jesuita a Refugiados, Entreculturas trabaja para garantizar la educación de la población desplazada y refugiada en el Este de Chad. Ante el Covid-19, ha continuado sensibilizando, tanto al alumnado como a las comunidades, sobre el virus, y así ayudar a la prevención de su propagación. Ha facilitado el lavado de manos y evitado aglomeraciones para que las aulas sean lo más seguras posible y la educación pueda seguir abriendo oportunidades de futuro.
Una mirada que no deja a nadie atrás en Ecuador
En Ecuador, la emergencia sanitaria se suma a la crisis financiera que sufre el país, afectando especialmente a las personas más vulnerables. Junto a Fe y Alegría, ofrece acompañamiento educativo a más de 3.200 niñas, niños y adolescentes. Dota a docentes y familias de recursos tecnológicos, formación y medios de comunicación para un aprendizaje adaptado a las nuevas circunstancias. Para que nadie quede atrás y la mirada de la educación continúe donde más se necesita.
Una mirada que acorta distancias en Amazonía
En el Vicariato de San José del Amazonas, en la selva peruana, los pueblos indígenas en situación de aislamiento son los más vulnerables. Impedir que el covid-19 llegue es fundamental.
Junto al Servicio Jesuita Panamazónico, reparte alimentos a las familias, ofrece información y material sanitario para la protección frente al virus. Cuenta con equipos médicos básicos para la atención de personas afectadas. Para seguir mirando a cada persona y continuar a su lado.