La Consejería de Salud ha comenzado a instalar ecógrafos en los centros de salud. Así, hasta 33 centros cuentan ya con estos equipos con los que los profesionales podrán aumentar la capacidad de diagnóstico y de tratamiento de algunas patologías sin necesidad de derivar al médico especialista.
El Gobierno regional ha invertido más de 3,2 millones para la compra de 95 ecógrafos destinados a todos los centros de salud y urgencias hospitalarias. Todas las urgencias hospitalarias cuentan ya con estos equipos.
El objetivo es que todos los centros de salud dispongan de un ecógrafo en los próximos tres años, y estén en disposición de aumentar su capacidad resolutiva al aumentar la capacidad de diagnóstico y tratamiento de algunas patologías sin necesidad de derivar al médico especialista.
Con la incorporación de los ecógrafos a los centros de salud se da un nuevo impulso al trabajo que desarrollan los equipos de atención primaria, facilitando su labor al aumentar la capacidad resolutiva del médico de familia, además de suponer una ayuda para un mejor manejo de los problemas de salud del paciente en la consulta del médico.
Así, el paciente podrá salir de la consulta de su médico de cabecera con un diagnóstico y tratamiento o, si fuera necesario, con una derivación al especialista, y no tendrá que ir al servicio de Radiología hospitalario o al centro de especialidades para someterse a la prueba y tener que volver al centro de salud para que la valore su médico.
El médico de familia y los pediatras podrán utilizar el ecógrafo en casos como infecciones respiratorias, problemas de cuello o tiroides, de abdomen, daños osteomusculares o incluso ginecológicos.
La progresiva implantación de la ecografía clínica en los centros de atención primaria constituye una de las líneas de mejora de la atención sanitaria en la Región, por cuanto resulta muy eficaz para aumentar la capacidad diagnóstica y optimizar derivaciones a la atención especializada.
Gracias a la incorporación de estos equipamientos se acortarán los tiempos de atención a los pacientes, que no tendrán que acudir a los servicios de Radiología para someterse a las pruebas, lo que reduce las listas de espera, y se da un nuevo impulso al trabajo de los equipos de Atención Primaria, a los que se facilita y agiliza su labor.
Por otra parte, la aplicación de la ecografía en los servicios de urgencias hospitalarias incide de forma directa en la mejora de la atención del enfermo a la hora de detectar e identificar traumatismos o patologías que revisten gravedad y requieren una atención rápida.
Los médicos especialistas en Medicina de Familia y Comunitaria de los centros de salud recibirán formación específica para el uso de estos ecógrafos.