Esta mañana, la Asamblea Regional ha aprobado la Ley Integral de Protección al Mar Menor, más conocida como el "Pacto del Nitrato". El único grupo que ha mantenido su postura de defensa de la laguna ha sido el de Podemos. La portavoz morada en la cámara autonómica, María Marín, ha asegurado que la aprobación de esta norma supone "una oportunidad perdida", ya que se trata de "una ocasión desperdiciada para poner soluciones reales y eficaces que pongan remedio a la catástrofe ecológica provocada por la destrucción del Mar Menor". Marín ha recordado que los sucesivos gobiernos regionales se han "limitado a negar la crisis durante décadas", mientras que "los grupos ecologistas, los científicos, e instituciones nacionales e incluso europeas advertían de la situación límite en la que estaba la laguna salada". Con la ley aprobada hoy, lejos de cumplir con la obligación legal y moral de cuidar nuestro entorno natural, para Podemos "se da luz verde a las aspiraciones de las grandes corporaciones agroindustriales, que envenenan el terreno, destruyen el Mar Menor y acaban con la agricultura tradicional de la zona". Por ello, Marín ha asegurado que se trata de una norma redactada "al dictado de quienes son los responsables materiales del atentado contra nuestra tierra".
La portavoz de Podemos ha mostrado además su desconcierto ante la postura del PSRM, cuyo portavoz Diego Conesa ha pasado "en cuestión de dos meses de anunciar una moción de censura por el estado del Mar Menor a pactar con el Gobierno Regional una ley que ni protege, ni recupera, ni garantiza el futuro de la laguna". Marín ha asegurado "no entender cuáles son los intereses que hay detrás de ese cambio de rumbo", y ha reiterado el compromiso de Podemos para "seguir defendiendo en la Asamblea Regional el fin de los vertidos, frente a una ley de PP, PSOE y Ciudadanos que legaliza un disparate como autorizar que cada hectárea cultivada pueda arrojar 170 kg anuales de nitratos".
La diputada de Podemos ha destacado que se trata de una ley "llena de trampas, que va a provocar una gran inseguridad jurídica", que además "se queda muy corta, como demuestran las medidas mucho más exigentes" aprobadas por la Confederación Hidrográfica del Segura la semana pasada a instancias del Ministerio de Transición Ecológica. Medidas que coinciden, tal y como ha recordado, con las enmiendas planteadas desde Podemos, "a pesar de que los firmantes de este pacto del nitrato han decidido votar en contra". La ley del Mar Menor, ha resumido Marín, "nace muerta, no protege al Mar Menor y solo ha servido para que PSOE, PP y Ciudadadanos se retraten como los tres tenores de las multinacionales de la agroindustria". Es una norma con "alto contenido de propaganda, rayando incluso la publicidad engañosa" cuando habla de una franja de 1.500 metros de agricultura sostenible de precisión, un término que "se han inventado expresamente para esta ley", que "no está regulado por ningún mecanismo o institución", y que "no tiene una normativa que fije sus límites". Desde Podemos denuncian que PSOE, PP y Ciudadanos pretenden "confundir esta agricultura de precisión con la agricultura ecológica o con la agricultura tradicional de la zona, cuando en realidad es una artimaña continuar con los vertidos de la agroindustria".
En cuanto a las enmiendas, Podemos ha lamentado que no se haya aprobado la presentada por Marín para la creación de un Parque Regional en el Mar Menor, que "reconozca la personalidad específica del Mar Menor y amplíe y unifique las distintas figuras de protección que ya existen". Sí que ha salido aprobada la enmienda de Podemos para incluir en la ley un capítulo económico que recoge "ayudas directas a los agricultores que hacen las cosas bien y quieren seguir haciéndolas, a todos esos pequeños y medianos agricultores que compraron una tierra en el campo de Cartagena y que necesitan ayuda para adaptarse a esta nueva situación". Esa agricultura familiar y ecológica por la que apuesta Podemos es la agricultura "compatible con la protección del Mar Menor, la agricultura que garantiza el futuro para la laguna, para sus habitantes y para quienes tienen en ella su modo de vida". Por último, Marín ha asegurado que a Podemos "no pueden presionarle las grandes corporaciones, porque no les debemos nada, y por eso no nos confundimos de lugar. Nuestro lado está junto a los vecinos y vecinas, junto a los comerciantes de la zona y junto a quienes apuestan por una agricultura tradicional, autóctona y respetuosa con el medio ambiente".