El obispo de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, manifiesta que la Diócesis que pastorea asume, en su totalidad, las disposiciones establecidas por la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española, para reiniciar el culto público en los templos católicos durante la desescalada de las medidas restrictivas del tiempo de pandemia, previsto para el lunes 11 de mayo.
"La misericordia de Dios es grande y siempre nos faltarán palabras para seguir dándole gracias, porque las circunstancias actuales apuntan a una esperanza mayor, ya que la noticia es que va remitiendo la enfermedad del Covid-19, aunque se deban mantener todavía las debidas precauciones y prudencia que nos aconsejan las autoridades sanitarias", explica el obispo en una carta dirigida a sacerdotes, religiosos y laicos.
Mons. Lorca precisa, en un documento anexo, que será necesario ubicar en los templos, en el acceso a la celebración, gel hidroalcóholico y un cubo de basura con pedal o papelera con bolsa de cierre. El párroco o rector de la iglesia tendrá que marcar los lugares en los que se podrán sentar los fieles con algún distintivo, teniendo en cuenta el máximo de aforo permitido y cumpliendo las distancias de seguridad establecidas. No se permitirá a los fieles circular por el templo y se prohíbe tocar o besar las imágenes.
Durante la liturgia se limitan los lectores a dos personas; no habrá asistentes en el altar, permitiendo al sacerdote tener una credencia auxiliar junto al mismo; al final de la celebración, el sacerdote indicará a los fieles dónde se encuentra la bandeja o bolsa para realizar la colecta, evitando tocar el dinero durante la celebración; se recomienda el uso de dos patenas, una para las formas pequeñas de los fieles y otra para la forma grande; también se sugiere a los sacerdotes consagrar las formas necesarias para evitar una reserva del Santísimo cuantiosa; y en el caso de que haya concelebración, los sacerdotes comulgarán por instinción y el último que comulgue sumirá la Sangre del Señor en su totalidad.
El documento detalla, además, que para el momento de la comunión el sacerdote que preside suma la Sagrada Forma grande entera; si la presencia de fieles lo permite, lo ideal es que la comunión la distribuya solamente el sacerdote, si necesita la asistencia de un ministro extraordinario, deberán extremarse las medidas de seguridad; en la fila de la comunión se guardará la debida distancia, de al menos metro y medio, y se dispensará gel hidroalcóholico a los fieles en las manos mientras hacen la fila; para favorecer la distancia de seguridad entre el ministro y el fiel se podrán usar los reclinatorios u otros enseres que sirvan para marcar dicha distancia; los fieles deberán comulgar, preferentemente, en la mano; y los ministros que distribuyan la comunión usaran gel hidroalcóholico, antes y después de dar la comunión.
Mons. Lorca prorroga para la Diócesis de Cartagena la dispensa del precepto dominical en los términos señalados por el episcopado español: "Invitando a la lectura de la Palabra de Dios y a la oración en las casas, pudiendo beneficiarse de la retransmisión a través de los medios de comunicación para quien no pueda acudir al templo. También, se invita a las personas mayores, enfermas o en situación de riesgo a que valoren la conveniencia de no salir de sus domicilios".