La EPA del 1° Trimestre de 2020 eleva la tasa de paro en España al 14,4%, a pesar de no reflejar los cientos de miles de trabajadores que están en ERTEs.

Las malas cifras, por esperadas, no son mejores. La crisis sanitaria del coronavirus y su traslado directo a la economía española está golpeando sobre unmercado laboralque ha llegadoa la pandemia con un ritmo de crecimiento ya de por sí lento y con signos de agotamiento tras seis años de creación de empleo, y nos deja una tasa de paro de 3.300.000 personas. Estas cifras sin duda se quedarán cortas cuando se vean los resultados de la pandemia por COVID19 en el segundo trimestre de este año.

Los datos publicados hoy de la Encuesta de Población Activa (EPA)por el Instituto Nacional de Estadística, a pesar de ser malos, no reflejan los cientos de miles de trabajadores que están en ERTES, y que en la Región de Murcia supera las 23.000 empresas y los 90.000 trabajadores afectados, ya sea por COVID-19 ó por Causas Económicas u Organizativas.

Pese a abarcar esta el primer trimestre del 2020, las conclusiones de la EPA son la media de esos tres meses y no reflejan la auténtica magnitud del impacto en el empleo que está dejando el covid-19. Sí constatan un mercado laboral que, pandemias aparte, y tras casi seis años de creciendo en número de ocupados, daba visos de estancamiento al inicio de este 2020.

El primer trimestre suele arrojar malos datos, por situarse tras la campaña navideña y antes de la de Semana Santa, en lo que a ocupación y contratos se refiere. Los tres primeros meses del año registraronuna media de19,6 millones de ocupados, 285.600 ocupados menos que en el trimestre anterior. Esto se traduce en que el 1° trimestre de este año la ocupación sufre un descenso en el inicio del año, algo que no se producía desde el 1° Trimestre de 2013, que comenzó a crearse empleo neto. Incluso los datos son negativos si los desestacionalizamos, es decir, le quitamos el componente cíclico de la estacionalidad y la temporalidad de contratos de temporada: los datos desestacionalizados reflejan una bajada de la ocupación del 0,41% en el 1° trimestre de este año, cuando llevaba 25 trimestres consecutivos al alza.

Y otro dato que refleja la ralentización de la creación de empleo se puede observar en que en los últimos 12 meses el paro solo se redujo en 41.200 personas (-0,04%).

VALORACIÓN DE UGT

Esta crisis no finalizará con el fin del Estado de Alarma. Para UGT es imprescindible continuar aplicando medidas económicas y laborales que protejan a las personas que han perdido el empleo, no pueden acceder a uno o se han visto afectados por una reducción de ingresos. Es urgente poner en marcha una renta mínima coyuntural y extraordinaria que dé cobertura a las cientos de miles de familias que se han quedado fuera del escudo de protección social y hasta que se haga realidad una Ley de Ingreso Mínimo Vital.

Asimismo, es imprescindible sostener el apoyo a las empresas, en especial a las pymes, con el fin de evitar la destrucción del tejido productivo y del empleo. Exigimos la extensión y favorecimiento de las medidas de ajuste temporal (ERTE) para salvaguardar la existencia de nuestras empresas y empleos durante la desescalada. Si no es así, todo el esfuerzo realizado se irá por el sumidero y se destruirá el empleo que hemos conseguido preservar y las empresas desaparecerán.

A nivel de la Región de Murcia, UGT considera que la 'Estrategia' que el Gobierno Regional quiere poner en marcha no es el modelo más adecuado ahora mismo, porque significa medidas a medio y largo plazo, cuando ahora mismo hace falta una intervención urgente que ayude a las personas que peor lo están pasando. Las medidas anunciadas por el Gobierno de López Miras son inconexas, descoordinadas de las puestas en marcha por el Gobierno de España y no tienen visos de iniciarse a corto plazo. Las organizaciones sindicales hemos elaborado propuestas e iniciativas que ya se les ha trasladado al Gobierno Regional y esperamos que en breve se pongan en marcha. Es de urgente necesidad rescatar a las personas, no debemos permitir que pase más tiempo sin medidas reales y rápidas en su ejecución.