La décima experiencia efímera del movimiento gastronómico Fash Food ofrece a 30 comensales una experiencia exclusiva, ambientada en los animales, el diluvio universal y la época bíblica, con varios guiños a pasajes del Antiguo y Nuevo Testamento, en Finca San Antonio Cuesta Blanca.

Pedro Carlos, chef de Los Cazadores de Corvera, y su equipo de servicio, fueron los responsables de ponerle sabor y su estilo propio al menú de la cena, basado en ocho pases con diferentes carnes de caza: perdiz, jabato y ciervo, entre otros.

El maridaje tuvo especial protagonismo, porque los asistentes pudieron probar la armonía de cada plato con la selección en exclusiva de la mano de la sumiller Esperanza Pérez, de La Gracia, con cerveza Estrella de Levante y diferentes vinos de la D.O.P. Jumilla.

La primera experiencia Fash Food del año abre la veda de los diferentes eventos gastronómicos que se celebrarán por ser elegida Murcia como Capital Gastronómica 2020. 30 comensales comenzaron su experiencia Noé desde un lugar de Sangonera la Seca llamado La Paz. Con ganas de comenzar su deseada cita gastronómica, siguen las indicaciones de la organización que les llevan hasta Finca San Antonio-Cuesta Blanca. Allí, Noé y su burro Macario les guiaron hasta buscar la salvación del diluvio universal y una experiencia única. Todos cumplen el vestuario recomendado, basado en motivos animales (Animal Dúo), que eligieron por parejas, desde jirafa hasta leopardo o tigre.

La primera parada es al aire libre, donde Noé les indica y les ofrece el primero de sus manjares: un vermut 'Hazloconvergüenza' de Bodegas Salzillo (Jumilla), y para acompañar, el primer milagro de la noche: panes y peces, pan artesano de la mano de La Madrugada de Javi Moreno, con embutidos de atún de la marca altúntun. Entonces, se abren las puertas del comedor donde cada comensal está a salvo, buscando un sitio seguro para "sobrevivir" a una noche de tormenta llena de sabores y diversión. Los primeros bocados son tres snacks, preparados por el equipo de Los Cazadores de Corvera, con su

chef Pedro Carlos a la cabeza: caballito de maíz con teriyaki, patacón de steak tartar de ciervo y croqueta de perdiz, maridado con una cerveza Punta Este, de Estrella de Levante, presentada por la sumiller Esperanza Pérez, de La Gracia.

Noé hizo diferentes juegos para amenizar la tormenta y la travesía de los comensales hacia la salvación, y buscando un lugar seguro con canciones, juegos entre ellos, para sacar su lado más animal y divertido. A continuación llega el momento de los diferentes platos de un menú basado en la carne, con la colaboración de distribuciones DOrigen: rosbif de jabato con reducción de naranja y miel; brioche tostado de chato murciano al Josper; canelones de pato, salsa de boletus y cebolla crujiente; lingote de arroz con boletus y faisán y un solomillo de gamo con reducción de Monastrell. Cada uno los pases fueron maridados, bajo la selección de la sumiller de La Gracia, con diferentes vinos de diferentes bodegas de la D.O.P Jumilla como Bodegas Delampa, Bodegas Luzón, Bodegas Bleda, Bodegas Carchelo y Bodegas San Isidro.

La decoración respetaba el entorno natural de la Finca y se planteó en torno al concepto de Noé, con diferentes figuras de animales sobre las mesas, iluminación indirecta, tejidos naturales, etc. para darle importancia al propio contexto y a la arquitectura de la finca de celebraciones, basado en la decoración del decorador e interiorista Paco Martínez Almagro.

El postre que el equipo de Los Cazadores de Corvera preparó para despedir la experiencia era un helado de higos, con crema inglesa y galleta, y diferentes texturas y sabores perfectamente en armonía con el vino Dulce tinto Monastrell de Bodegas Casa de la Ermita, (D.O.P. Jumilla).

La experiencia Noé volvió a levantar a los asistentes con música basada en animales, para abrirle las puertas del Arca y celebrar la salvación de los animales con un destilado llamado Apple Temptation a base de Ron Diplomático Mantuano, alrededor de un olivo desde el que colgaban las manzanas de la tentación. El cóctel final fue preparado por Campoluz, y acompañado por la música en directo de un violinista de Musical Mastia.

Al movimiento Fash Food se ha sumado la colaboración de Estrella de Levante, la D.O.P. Jumilla, Bodegas Salzillo, Fornet, La Gracia, encanto líquido, altuntún, panadería artesana La Madrugada de Javi Moreno, distribución Dorigen, Musical Mastia, Finca San Antonio Cuesta Blanca y el estudio de fotografía y vídeo Barita.