La Fundación Mutua de Propietarios, en colaboración con la aseguradora Mutua de propietarios, han presentado hoy #SuperVecinos, la campaña de concienciación social que a través de una historia real desea llamar la atención sobre la situación de los más de 1,8 millones de españoles con movilidad reducida que precisan de ayuda de terceros para salir de sus casas y, especialmente, de los cerca de 100.000 que nunca lo hacen.
La campaña parte con un experimento social realizado en una comunidad de vecinos residentes en un inmueble no accesible de la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes. Su vecina Andrea -de 71 años, con Parkinson, en silla de ruedas- es la cara de la campaña. La cruz son las barreras arquitectónicas de su edificio: los cuatro tramos de escaleras que la convierten en prisionera de su propia casa.
Andrea vive junto a su marido en el cuarto piso, sin ascensor. Cuando se grabó su testimonio, llevaba 16 días sin salir de su hogar. Andrea es conocida por todos sus vecinos. Su salud ha empeorado de forma rápida y depende de la ayuda de terceros para poder realizar cualquier tipo de gestión fuera de su vivienda. Como ella, un 73% de los españoles con movilidad reducida se encuentran en esta situación.
#SuperVecinos quiere hacernos reflexionar. Quizás tienes algún vecino con movilidad reducida en tu edificio. Quizás necesite ayuda. Y, quizás, tú puedas ayudarle. “Ser un Super Vecino es tomar conciencia de su situación; es promover la toma de decisiones en tu comunidad de propietarios para hacer el edificio accesible o, simplemente, ayudar con los recados y las gestiones diarias o la compañía”, explica Laura López Demarbre, directora de la Fundación Mutua de Propietarios.
El informe “Movilidad reducida y accesibilidad en el edificio” elaborado por la Fundación Mutua de Propietarios fue el punto de partida de la campaña. En España hay 2,5 millones de personas con problemas de movilidad1 y un 4% no puede salir de casa. De hecho, la falta de accesibilidad del edificio provoca que un 22% de las personas con movilidad reducida haya tenido que cambiar de casa.
“La escasez de ayudas públicas para hacer accesibles los edificios y el desistimiento de las propias comunidades de propietarios que, por falta de recursos económicos o desconocimiento, no realizan las obras de adaptación del edificio necesarias provocan que miles de personas queden atrapadas en su hogar”, señala López Demarbre. Y es que, a esas 100.000 personas que no salen nunca de su casa, hay que añadirle un 42% que permanece muchos días sin hacerlo. En el caso de los mayores de 70 años, este porcentaje se eleva al 60%.
Pero #SuperVecinos no es sólo una campaña social, también es una petición a las administraciones públicas para que destinen fondos a la adaptación de los inmuebles y un recordatorio a las comunidades de propietarios de su obligación con las personas con discapacidad o movilidad reducida residentes en la finca. “Consideramos imprescindible el apoyo económico de la administración pública para que las comunidades de propietarios puedan llevar a cabo sus obras de adaptación para la mejora de la accesibilidad y rehabilitación. Para nosotros disponer de edificios adaptados y seguros es un valor indispensable para garantizar el derecho a la independencia de las personas con movilidad reducida y todos los vecinos que residen ellos”, afirma el Director General de la aseguradora Mutua de Propietarios, Christopher Bunzl.