Para encontrarlo prefieren los portales de búsqueda online frente a métodos más tradicionales
Poco realizados y peor valorados: así se sienten los españoles en el trabajo. Este es el preocupante dato que revela el informe realizado con motivo del Día del Trabajador por Acierto. El estudio analiza algunas de las cuestiones que más preocupan a los trabajadores españoles, tanto a aquellos que ya cuentan con un empleo como a los que han sido despedidos.
Las conclusiones apuntan a que este sentimiento tiene que ver con la retribución salarial, la proyección en la empresa, así como con el reconocimiento en general de superiores y jefes. El dato positivo es que son pocos los encuestados que se refieren a las labores desempeñadas en su puesto.
Respecto a la retribución, solo 3 de cada 10 españoles está satisfecho con lo que cobra. Un perfil que responde al de hombre entre los 40 y 45 años con estudios superiores, que precisamente son los que más cobran. La brecha salarial entre ellos y ellas también hace que las mujeres se encuentren más insatisfechas.
Si nos centramos en el salario mínimo, hasta 9 de cada 10 españoles lo consideran injusto. Algo que se suma a otras insatisfacciones como la falta de conciliación familiar y que acaban con hasta 8 de 10 españoles infelices en el puesto que ocupan. En cualquier caso, cabe comentar que son precisamente los profesionales que requieren de una formación específica o de estratos sociales más bajos, los que se encuentran menos satisfechos. Curiosamente, 4 de cada 10 empleados estarían dispuestos a cobrar menos a cambio de mayor felicidad laboral.
Por otra parte, reconocer a los empleados resulta muy positivo para las empresas, ya que aquellos empleados que reciben felicitaciones en el trabajo acaban siendo un 12% más productivos. Y a la inversa: la falta de satisfacción en el trabajo reduce la productividad y la calidad del trabajo e incrementa el absentismo laboral. Es decir: que hace a las empresas perder dinero. Por no hablar de que estos empleados pueden marcharse y obligar a la compañía a destinar recursos a la búsqueda y formación de nuevos perfiles.
El paro, motivo de preocupación
Pero el sueldo no es la única cuestión a la que prestamos atención, sino que el paro continúa postulándose como la primera causa de inquietud entre los españoles por delante de la corrupción y el fraude. Un punto que no nos extraña si tenemos en cuenta que el último trimestre del año ha cerrado con 49.900 parados más, el peor arranque de año desde 2013 y que la prestación por desempleo es más corta, baja, y tiene menos beneficiarios.
De hecho este es uno de los puntos de inflexión: según citado estudio, el 67% no está de acuerdo con la duración de la prestación por desempleo actual. De entre ellos, el 56% estima que debería prolongarse durante seis meses por año trabajado, mientras que el resto aumentaría esta cantidad a ocho y doce meses (el 14% y 13% respectivamente). Los españoles tampoco están conformes con cobrar menos a medida que pasa el tiempo; algo que comparte hasta el 76% de los encuestados.
El 60% de los españoles busca activamente empleo
Y no solo inquieta la situación de desempleo en sí misma y cómo abordarla, sino que casi 9 de cada 10 españoles considera que las indemnizaciones por despido son injustas. En concreto, el 77% piensa que deberían superar los 40 días por año trabajado, mientras que el resto establece un mínimo de al menos un mes por este mismo periodo de empleo. A pesar de esta forma de pensar, el 34,6% es capaz de ponerse en la piel de la empresa que le despide. Teniendo en cuenta que a casi la mitad de los españoles les han despedido alguna vez, no parece una cuestión baladí.
El análisis realizado por el comparador de seguros también desvela que el 60% de los españoles busca activamente empleo; y que prefiere los portales específicos online para hacerlo. Unos canales que les permiten acceder y comparar entre diferentes ofertas de empleo. Solo un 4,5% va más allá y emplea las redes sociales; y el resto opta por métodos más tradicionales: el 26,5% busca trabajo por el INEM y el 9% acude a tirar el currículum de forma presencial.
Por desgracia, un escaso 8,4% de los participantes del estudio tuvo más de siete entrevistas durante el último año. De hecho, al 36,7%, la mayoría, le llamaron para una o dos. El 25,6% no hizo ninguna, y el 20,8% acudió entre a tres y cinco. El 8,3% restante realizó entre cinco y siete entrevistas. En definitiva unos números nada halagüeños si tenemos en cuenta el ahínco con el que los españoles buscan empleo.
El crecimiento de los autónomos se estanca
En esta situación, emprender y hacerse autónomo se postulan como alternativas. Sin embargo y aunque el año pasado su número creció notablemente, los datos más recientes revelan una deceleración de este crecimiento: en concreto, los autónomos han aumentado cinco veces menos que en 2018. En números, fuero 6.000 los autónomos que se registraron en el primer trimestre de 2018. Este 2019 apenas hemos llegado a los 1.600 trabajadores en el mismo periodo.
No es de extrañar 3 de cada 5 españoles consideren que la situación de los autónomos en España es mala o muy mala. El 35,2% la define como “regular”; y para el 8% restante es buena. Y es que las cuotas, la posibilidad de quedarse parado por una enfermedad, sin vehículo, etcétera, son algunas de las cuestiones que no acaban de convencer a los españoles.
Con el objetivo de protegerse ante estas eventualidades, son cada vez más los autónomos que se decantan por seguros específicos. Es el caso del seguro de baja laboral, que les permite recibir una cantidad diaria si se ponen enfermos o sufren una incapacidad laboral temporal que les impide seguir trabajando. También existen seguros de jubilación, interesantes para aquellos que cotizan por la base mínima. "No obstante, antes de contratar cualquiera de estas pólizas, resulta fundamental que los interesados comprendan qué queda cubierto y qué no, y que comparen primas y prestaciones para garantizarse la mejor relación prima-cobertura" comenta Carlos Brüggemann, cofundador del citado comparador.