El proyecto 'CarPriMur', puesto en marcha por la Consejería de Salud para mejorar la atención a los pacientes con patologías cardiacas, ha incorporado un aula de pacientes para facilitar su autocuidado.
La iniciativa, que llevan a cabo de forma conjunta cardiólogos y enfermeras, se acaba de poner en marcha para formar a pacientes con patologías frecuentes como la fibrilación auricular, un tipo arritmias frecuentes en personas mayores, o la insuficiencia cardíaca.
Las sesiones educativas se desarrollan dos veces a la semana y en cada una de ellas acuden de cuatro a ocho pacientes acompañados de sus familiares más cercanos, con ellas "se pretende que los pacientes sean conocedores de su enfermedad, su tratamiento y las posibles complicaciones", explicó el consejero de Salud, Manuel Villegas, durante la presentación de esta nueva iniciativa. De esta manera, "se les enseña y se les implica mucho más en el autocuidado y en el tratamiento de su enfermedad promoviendo el empoderamiento del paciente".
El material educativo que se emplea en estas sesiones ha sido elaborado por el grupo de trabajo de enfermedades del corazón de la Escuela de Salud y próximamente estará disponible en la página web para que pueda acceder a él cualquier ciudadano con este tipo de patologías.
Por otro lado, se pretende estudiar cómo está intervención educativa ayuda a controlar los factores de riesgo asociados a complicaciones como hemorragias, ictus e ingresos hospitalarios por causas cardiológicas.
El proyecto 'CarPriMur' se inició en octubre de 2017 para mejorar la formación de los cardiólogos en relación con los problemas que se plantean a diario en el ámbito ambulatorio y ha conseguido reducir un 40 por ciento las visitas médicas presenciales.
'CarPriMur' tiene entre sus objetivos mejorar la continuidad asistencial de los pacientes cardiológicos, promover la formación de los profesionales sanitarios, favorecer el uso más eficiente de los recursos sanitarios y mejorar los resultados clínicos, así como el grado de satisfacción de médicos y pacientes.
A nivel asistencial, los cardiólogos se desplazan a los centros de salud y también se ha puesto en marcha un sistema de interconsulta no presencial, con el que ya cuentan 43 centros de salud de la Región y que en breve se implementará en las áreas de Lorca, comarca del Noreste y la Vega Alta del Segura.