La Comunidad pone en marcha una campaña específica de mediciones para monitorizar y vigilar la calidad del aire en el entorno de la Sierra Minera. Este estudio, que está siendo desarrollado por investigadores de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), supone una fase previa que se prolongará durante seis semanas y cuyas conclusiones servirán para diseñar y llevar a cabo una monitorización más amplia en la zona que tendrá una duración mínima de un año e incluirá la realización de varias campañas de medición para tener caracterizadas las cuatro estaciones climáticas.
Para el estudio se contará con tres captadores de partículas (PM10 y PM2,5), que posteriormente serán analizadas en laboratorio para determinar la posible presencia de metales como plomo, cadmio, cinc, níquel, arsénico o manganeso. Las estaciones, cuya instalación comenzó a finales de la semana pasada y concluyó hoy, están ubicadas en el entorno de El Llano del Beal y El Estrecho de San Ginés, un emplazamiento decidido tras un intenso trabajo junto con los especialistas de la UPCT para buscar los lugares que permitiesen asegurar la eficacia de las mediciones.
Las conclusiones del proyecto, que cuenta con un presupuesto de 135.000 euros, ayudarán a diseñar y priorizar otras acciones, estudios e investigaciones para avanzar hacia la recuperación ambiental de esta zona. Esos datos, además, serán evaluados por la Dirección General de Salud Pública para garantizar la salud de los habitantes de los núcleos urbanos.
Además, los resultados de estos análisis se podrían utilizar como base para valorar si se incluye la medición de metales en el modelo de predicción y diagnóstico de calidad del aire de la Región (Sinqlair).
El director general de Medio Ambiente y Mar Menor, Antonio Luengo, supervisó hoy las labores de puesta en funcionamiento de los tres captadores que proporcionarán los datos para el estudio. Durante su visita a la zona, explicó que este estudio es una de las diez actuaciones puestas ya en marcha en el marco del Plan para la Recuperación Ambiental de los Suelos Afectados por la Minería (Prasam).
Enfoque multidisciplinar e integral
"Hemos diseñado una estrategia para abordar la recuperación de esta zona desde un punto de vista multidisciplinar e integral y, en este sentido, uno de los aspectos que necesitamos conocer es la posible presencia de metales en el aire y, en caso positivo, cuáles son sus niveles y su comportamiento. Este estudio, que responde además a una de las preocupaciones planteadas por los vecinos de la zona, nos dará una valiosa información que nos permitirá plantear nuevas acciones como podrían ser la creación de barreras vegetales que actúen como filtros alrededor de los núcleos urbanos", destacó Antonio Luengo.
Además de esta decena de actuaciones ya en marcha, el Prasam cuenta con otras 20 estructuradas en torno a cuatro objetivos específicos como el conocimiento y la mejora en la gestión de las zonas mineras, la difusión de información y la concienciación de los ciudadanos sobre la situación de estos emplazamientos, el impulso de la recuperación ambiental de estas zonas y la prevención y vigilancia en torno a las mismas.
El plan, que se desarrollará a lo largo de los diez próximos años y al que se destinarán 84,8 millones de euros, es una hoja de ruta que servirá como guía para neutralizar, ordenar y ejecutar la recuperación de las zonas afectadas por la minería, una actividad que se ha desarrollado de manera histórica en la Región y con una mayor intensidad en los últimos 150 años, y transformar la problemática actual en una oportunidad desde el punto de vista socioeconómico, ambiental, cultural y paisajístico.