El pasado miércoles 21 de noviembre, en el Archivo General de la Región de Murcia, el Instituto Murciano de Acción Social (IMAS), en colaboración con la empresa Tunstall Televida, gestora del servicio de teleasistencia desde el año 2008, celebró una jornada técnica que permitió a más de un centenar de profesionales de los servicios sociales conocer el modelo de atención personalizada en teleasistencia.
Este nuevo modelo de servicio es el primero que incorpora a las personas dependientes y se implantará en los próximos meses en la Región de Murcia. Asimismo, en la jornada se presentaron las novedades que supone este cambio de paradigma en la atención a las personas en situación de dependencia y a sus cuidadores.
La directora gerente del IMAS, Verónica López, encargada de abrir la jornada, afirmó que este "es un proyecto que valorará de forma individual y mucho más ajustada las necesidades de las personas usuarias para determinar qué prestaciones se adaptan mejor a ellas, de manera que estén lo mejor atendidas que sea posible".
En el marco de esta jornada, la técnica responsable del IMAS, Esperanza Breis, explicó en su intervención cómo ha evolucionado el servicio de teleasitencia desde su implantación en la Región de Murcia. Por parte de Tunstall Televida, intervinieron el delegado en la Región de Murcia, Frank Tavira, que habló sobre el estado actual del servicio, y el equipo técnico que ha desarrollado este nuevo modelo de servicio —Mª del Mar Entrambasaguas, Eva Binefa y Arianna Núñez—, que explicó en detalle el modelo y los programas que se desarrollan.
El servicio de teleasistencia del IMAS presta ayuda en la actualidad a casi seis mil personas, de las que más de 2.200 son personas cuidadoras de familiares dependientes. Cincuenta personas, entre las que se encuentran profesionales del centro de atención, de intervención domiciliaria y técnicos, trabajan para la atención de más de 13.000 personas usuarias de toda la Región de Murcia.
En 2010, este proyecto fue el primero en incluir en España a las personas cuidadoras en el servicio de teleasistencia, cuando se inició el Programa de Teleasistencia como Apoyo al Cuidador (PTAC). Este programa, dirigido a personas dependientes en grado II y III, determinaba el apoyo en función de los niveles de cuidado que necesitaba cada persona. Así, se asignaba una intensidad de servicio, una tecnología y unas actuaciones complementarias destinadas a facilitar la labor de aquellos que se encargaban del cuidado.
En el año 2014, el PTAC evoluciona para incluir a las personas dependientes en grado I y se convierte en un proyecto más preventivo, que contempla intervenciones específicas y que trabaja en la promoción del envejecimiento activo y la autonomía personal. Se añaden protocolos de actuación especiales (detección del maltrato, apoyo en duelo, grandes catástrofes, detección de ideación suicida), se mejoran las guías informativas para las personas cuidadoras y se potencia el uso de la teleasistencia móvil.
Este año se incorpora un nuevo modelo centrado en la persona, que cuenta con un sistema de valoración que permite ajustar de forma individual las prestaciones que recibe cada persona usuaria y cada persona cuidadora en función de sus necesidades dentro de un plan de atención individual que es revisado periódicamente para adecuarlo a los cambios vitales de las personas atendidas. Asimismo, se reformulan las guías informativas para centrarse en el autocuidado, las personas con demencia y el entrenamiento cognitivo, y se pone en marcha la plataforma online para la formación de personas cuidadoras, que se desarrolla en la actualidad como proyecto piloto.