El Obispo de la Diócesis de Cartagena ha visitado esta mañana, acompañado por la Consejera de Familia e Igualdad de oportunidades y la Alcaldesa de San Pedro del Pinatar, el espacio gestionado por Cáritas Diócesis de Cartagena en Lo Pagán para atender y dar cobijo a los migrantes menores de edad que han llegado en las últimas semanas a la costa de Cartagena.
Cáritas, como cauce para el compromiso y la acción caritativa de Iglesia, se ha coordinado con la Comunidad Cristiana de la Diócesis, para la cesión y consecución de espacios que permitan acoger, de manera urgente, a los niños y adolescentes sin familia que han llegado a las costas de la región en busca de esperanza y nuevas oportunidades. Fruto de ese compromiso y gestión, se habilitó en septiembre la casa del Ral en Alhama de Murcia, y ahora, se pone a disposición de la Comunidad la vivienda de Lo Pagán, cedida por las Hermanas de la Purísima Concepción.
Como parte de la Campaña, "Compartiendo el Viaje", impulsada por Cáritas Internationalis, Cáritas Diócesis de Cartagena
se hace eco
de la necesidad urgente de implementar de manera estable los recursos humanos y materiales necesarios para garantizar la acogida como primer paso para una política migratoria y de integración que respete los derechos humanos.Así mismo, Cáritas recuerda que el Papa Francisco promueve una cultura del encuentro que recoge en cuatro verbos el compromiso de la comunidad cristiana hacia los migrantes: Acoger, Proteger, Promover e Integrar. Verbos que fomentan una solidaridad más efectiva y que buscan desmontar mitos y crear espacios de encuentro entre las personas migrantes y las comunidades que los acogen. Siguiendo este mensaje del papa Francisco, para Cáritas la acogida se vuelve fundamental porque se traduce en ampliar las posibilidades para que los migrantes y refugiados puedan entrar de modo seguro y legal en los países de destino, no por compasión, sino como defensa de la dignidad fundamental de cada individuo y de los derechos humanos inherentes a cada persona.