La secretaria de Universidades e Investigación de la Federación de Enseñanza de CCOO, Encina González, aseguró hoy en una mesa redonda en la Universidad de Murcia que los cambios del Estatuto del Personal Investigador en Formación (EPIF) desde el primer al último borrador son considerables, aunque reconoció que todavía no se hallado la fórmula del salario de los investigadores.
En el marco del II Congreso Interdisciplinar de Jóvenes Investigadores, organizado por AJIUM, la representante sindical cree que el nuevo decreto ley que ha pasado el trámite de audiencia pública y está pendiente de publicaciónregula "positivamente" varios aspectos del estatuto como las jornadas de trabajo, las licencias, vacaciones y los permisos, entre otros.
Ante unos 30 jóvenes investigadores e investigadoras, Encina subrayó que el ordenamiento jurídico prevé que "todo aquello que no esté regulado pasa al Estatuto de Trabajadores" y que "los contratos temporales puedan ser considerados dentro de los convenios colectivos aprobados dentro de las universidades".
La responsable de FE CCOO expresó, por su parte, las dudas del sindicato en cuanto a las condiciones de suspensión de los contratos, sobre todo cuando hay un incumplimiento del director de la tesis doctoral por ser causa ajena al investigador.También defendió que para CCOO la dedicación docente debería ser un derecho pero no un deber del personal con contrato predoctoral, y que debería realizarse en áreas relacionadas con su trabajo de tesis doctoral.
Encina destacó también que el acuerdo alcanzado entre el Gobierno socialdemócrata y Podemos contempla una indemnización a la finalización del contrato. "Las modificaciones que se han ido introduciendo han mejorado el Estatuto del Personal Investigador en Formación; antes, los derechos eran pocos y los deberes muchos", precisó la sindicalista.
Asimismo, Encina insistió en que aún persiste el problema del salario, ya que no se ha hallado todavía una fórmula satisfactoria para los trabajadores, pero para el que defendió la interpretación de un mínimo de 16000 € anuales. Tambiénlamentó que haya desaparecido la figura de ayudante y se hayan perdido unos 100.000 investigadores estos últimos por la crisis y que no haya incorporación a las empresas de este colectivo, que suele acabar en organismos públicos de investigación y en la Universidad.
En la mesa redonda también participaron el rector de la Universidad de Murcia, quien se mostró en desacuerdo en temas de indemnización; el delegado del Gobierno, Diego Conesa Alcaraz; y el director general de Universidades e Investigación, Juan Monzó Cabrera.