El director general Francisco González Zapater durante su reunión con representantes de los productores de espinacas en la sede de Proexport
La Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca ha exigido al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación soluciones ante la cancelación de la autorización del único herbicida existente para el control de las malas hierbas para el cultivo de espinacas. Asimismo, ha solicitado medidas ante la falta de productos fitosanitarios para cultivos menores, es decir, aquellos que abarcan una escasa superficie, entre los que se encuentran cultivos hortícolas como apio y haba verde, entre otros, e incluso especies arbóreas como almendro, granado y pomelo.
El director general se reunió recientemente con técnicos representantes de unas 20 empresas productores de espinacas, para abordar posibles alternativas para el control de malas hierbas en este cultivo.
González Zapater explicó que “hasta que no concluya la evaluación a nivel comunitario de un herbicida y el posterior registro del formulado a nivel estatal, la única alternativa es la de solicitar al Ministerio una autorización excepcional, siempre y cuando exista el compromiso de la empresa de notificar su uso en estos cultivos”.
El director general destacó la importancia de los cultivos menores, ya que “son una alternativa a los cultivos tradicionales y abren oportunidades de nuevos nichos de mercado para su comercialización, al ser demandados por los consumidores”.
En la reunión se puso de manifiesto el escaso interés que tienen las empresas fabricantes de productos fitosanitarios en abordar el registro de estos formulados, debido al elevado coste que supone, que difícilmente se recupera con las ventas. Este aspecto está siendo estudiado por la Comisión Europea, pero aún no se ha resuelto, a pesar de que muchos de estos cultivos menores son demandados por el consumidor, ya que intervienen en los productos listos para el consumo que se ofrecen en los supermercados.
González Zapater informó a los representantes que “hasta el momento no existe en España una solución similar a la que ofrecen a sus productores otros estados, como Reino Unido, donde se permite la utilización de productos fuera de etiqueta (off-label) cuando estos tienen escasa incidencia en la dieta alimentaria”.
Cultivo de espinaca
El cultivo de la espinaca ocupa a nivel nacional una superficie de 10.000 hectáreas, de las que 6.000 corresponden a las denominadas ‘Baby leaf’, que son cultivadas para su envasado en bolsas. La Región de Murcia es la máxima productora con el 75 por ciento de la superficie total. Se trata de un cultivo de gran trascendencia en la exportación, con más de 30 millones de kilos comercializados fuera de nuestras fronteras, que suponen un valor de más de 45 millones de euros.