La Comunidad Autónoma desarrolla en colaboración con la Fundación Vodafone un programa de aprendizaje en el manejo de smartphones y tablets para las personas mayores que se está implantando en los 17 centros sociales de Instituto Murciano de Acción Social (IMAS).
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) pueden ser una herramienta que contribuya al envejecimiento activo. Además, se trata de reducir la brecha digital, para que las personas mayores se familiaricen con el uso de este tipo de dispositivos, y contribuir así a su integración y participación social.
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás, se reunió recientemente con el director general de la Fundación Vodafone España, Santiago Moreno. "Debemos seguir trabajando en el mensaje de que el uso de la red y las 'apps' pueden ser accesibles para todos. Por eso apoyamos iniciativas como la de la Fundación Vodafone, porque perseguimos un mismo objetivo: la necesidad de una accesibilidad universal y que el diseño para todos sea una realidad, especialmente para las personas mayores", explicó Violante Tomás.
Los centros de mayores constituyen un punto de encuentro para las personas de este colectivo que aún disfrutan de un buen nivel de autonomía. La consejera destacó que "los mayores abarcan una parte considerable de la población y son personas que, aunque ya no forman parte del mercado laboral, disponen aún de grandes recursos, de curiosidad para seguir formándose y de capacidad para participar en el bien común de la sociedad actual".
Un total de 103.000 personas mayores de 65 años son socias de estos centros sociales en toda la Región. Estos centros ofrecen unos 250 talleres, con diversidad de actividades (gerontogimnasia, memoria, yoga, tai chi, cuenta cuentos, senderismo, manualidades, etc.), y también estos de uso específico de dispositivos móviles.
Ampliando el uso de móviles
Internet es la herramienta de comunicación electrónica de mayor crecimiento mundial en las últimas décadas, pero la población que menos se ha beneficiado del uso de esas tecnologías ha sido la población mayor.
En 2007 siete mayores (de 65 a 74 años) de cada cien utilizaron Internet en los tres meses previos a la encuesta de Eurostat. En 2017 ya eran 44. Si se compara el uso que hacen las personas mayores con el de otros grupos de edad, por ejemplo, el de los más jóvenes (16-24 años), que son los mayores usuarios, se aprecia una distancia notable, denominada brecha digital.
Esta brecha se viene acortando en los últimos años. Así, la distancia entre uno y otro grupo ha pasado de 78,6 a 54,3 puntos porcentuales entre esas dos fechas, según la encuesta de 2017 sobre equipamiento y uso de Tecnologías de la Información y Comunicación en los hogares del Instituto Nacional de Estadística.
En cuanto al uso del móvil, los mayores lo utilizan más frecuentemente que Internet. La diferencia con otros grupos de edad es más reducida. En 2017 el 85,3 por ciento usó el móvil en los tres meses anteriores a la encuesta, frente al 99 por ciento del grupo de edad más joven.