La ciudad de Murcia luce hoy sábado 5 de mayo mucho menos atractiva de lo habitual. Y es que cerca de 270 establecimientos han secundado la jornada de cierre voluntario propuesta por Hostemur para reclamar al Ayuntamiento que abandone su autoritarismo y trabaje por una regulación consensuada del sector y que fomente un modelo de ciudad que satisfaga a todos. "La creación de las Zonas de Protección Acústica Especial (ZPAE) ha sido el último de los desmanes municipales que ha acabado con la paciencia de los hosteleros, hemos tenido que llegar a una situación así para manifestar de una forma contundente que el Ayuntamiento tiene que cambiar sus formas", explica el presidente de Hostemur Jesús Jiménez.
La patronal denuncia que los mapas de ruido para crear las ZPAE se han elaborado en base a un informe que presenta errores e irregularidades y solicita su anulación, ya que además para su aprobación se ha ignorado por completo al Consejo Sectorial del Ruido. "Esos mapas hay que hacerlos bien, con herramientas adecuadas. Debemos sentarnos todas las partes implicadas y con la aportación y el sacrificio de todos definir qué Murcia queremos, donde el descanso de los vecinos sea compatible con la hostelería que hace única nuestra ciudad, siempre desde la legalidad", apunta Jiménez, que recuerda que los hosteleros siempre se han visto como parte de la solución del problema.
Muchos problemas
Pero el sector no se queja solo de las ZPAE, ya que son muchos problemas los que llevan arrastrando desde hace años y muy pocas las soluciones negociadas que ha aplicado el Ayuntamiento. Hostemur solicita -todo ello tramitado por el Consejo Sectorial del Ruido- la actualización de las ordenanzas municipales que les permita trabajar en un marco jurídico estable e igualitario para todas las zonas de la ciudad, con un modelo de terraza unificado y útil.
Además, reclama la agilización de las licencias para las mismas, el establecimiento de criterios no restrictivos para calcular el aforo de los locales, la eliminación de las limitaciones injustificadas para ejercer la hostelería en calles de menos de 7 metros… "Hay un gran bloqueo en el Ayuntamiento, con muchos expedientes paralizados, con diversos criterios para la interpretación de las normas", se queja el presidente de Hostemur, que destaca que se ha conseguido "unir al sector para decir '¡basta ya!' y reclamar un marco jurídico legal, viable y estable que nos asegure un futuro para poder trabajar con dignidad y dentro de la legalidad".
Un gran sacrificio
Una jornada la de hoy en la que, además de los cierres para mostrar qué puede provocar a lo que han denominado "El Persianazo", se ha celebrado al mediodía una concentración silenciosa de protesta en la plaza de Santa Catalina donde se ha leído un manifiesto.
Un cierre de bares, cafeterías, restaurantes, locales de copas y discotecas con el que los hosteleros murcianos quieren mostrar cómo sería la ciudad sin la vida que sus establecimientos contribuyen a darle. "Es un gran sacrificio y el coste económico es muy importante para los empresarios que participan, que por supuesto pagarán el salario de todos sus empleados, pero nos hemos visto obligados para hacer oír nuestra reivindicación de un futuro en el que trabajar con tranquilidad, seguridad jurídica y dignidad", concluye el presidente de la patronal.