Se trata de adaptar las máquinas y puestos de trabajo al empleado para evitar esfuerzos físicos, ya que uno de cada cuatro accidentes laborales se debe riesgos ergonómicos

La Comunidad ha asesorado en lo que va de año a 422 empresas en materia de riesgos laborales

La Consejería de Empleo, Universidades y Empresa, a través de la Dirección General de Relaciones Laborales y Economía Social, está incrementando las visitas a pymes de la Región para prevenir los accidentes laborales por riesgos ergonómicos, que supusieron el 25 por ciento del total de accidentes durante 2016.

Concretamente, se busca promover una correcta adaptación de las máquinas y puestos de trabajo al empleado de cara a limitar sus esfuerzos físicos, y a partir de las recomendaciones que transmiten a las empresas los inspectores del Instituto de Seguridad y Salud Laboral (ISSL).

La Comunidad ha asesorado en lo que va de año a 422 empresas en materia de riesgos laborales. Específicamente, sobre riesgos ergonómicos la orientación ha abordado aspectos como el manejo manual de cargas, la adopción de posturas forzadas o la realización de movimientos repetidos en el trabajo que pueden producir daños en el aparato locomotor. Algunos de estos hábitos pueden generar también enfermedades profesionales de tipo músculo-esquelético, como tendinitis, epicondilitis o el síndrome del túnel del carpo.

En las visitas, los técnicos comprueban que en la empresa se ha llevado a cabo la evaluación específica de los riesgos ergonómicos y se han adoptado las medidas preventivas correspondientes. Si no es así, asesoran al empresario en la necesidad de abordar esa evaluación, a través de su servicio de prevención, como llevarla a cabo y qué medidas preventivas se pueden adoptar para controlar estos riesgos.

Visita a una empresa que aplica las recomendaciones

La directora general de Relaciones Laborales y Economía Social, Nuria Fuentes, visitó hoy la empresa Prosur en San Ginés (Murcia), que está centrada en el sector de productos naturales como componentes alimentarios, y que aplica desde 2015 las recomendaciones del ISSL en materia de riesgos ergonómicos.

La principal actuación planteada entonces pasó por la realización de estudios específicos de algunos puestos de trabajo, por el riesgo de lesiones en la espalda para determinados trabajadores. La medida preventiva proyectada por la empresa frente a este riesgo fue la mecanización de esas tareas, que se implantaría en las nuevas instalaciones.

En 2016 se visitaron las nuevas instalaciones y se verificó que se habían mecanizado dichos puestos. Con esta nueva visita se pretende comprobar que se han aplicado nuevas recomendaciones sobre el manipulado de cajas de pesos variables.

Nuria Fuentes destacó que "tener en cuenta los riesgos ergonómicos en el ámbito laboral es fundamental, porque permite la adecuación entre las características del trabajador y las operaciones que debe realizar para conseguir un producto de óptima calidad". En este sentido, añadió, "Prosur es un ejemplo de buenas prácticas, porque apostando por la mecanización de tareas y la innovación ha conseguido limitar al máximo esos riesgos".