Las pruebas de laboratorio no han detectado ninguna sustancia contaminante que evidencien un vertido
Los análisis realizados por los laboratorios de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) señalan la falta de oxígeno en el agua como única causa del episodio de mortandad de peces que se produjo el pasado 10 de agosto en el río Segura a su paso por la ciudad de Murcia. Las pruebas realizadas no evidencian la presencia de un vertido contaminante en esa zona.
Técnicos de la CHS tomaron muestras la mañana del suceso en tres puntos del tramo urbano del río Segura en Murcia (autovía, aparcamiento disuasorio y pasarela Manterola). En estos emplazamientos, se ha podido comprobar que la concentración de oxígeno se situó por debajo de lo habitual (3,22mg/l O2 , 3,87 mg/l O2 y 2,04 mg/l O2 respectivamente). Otros análisis realizados en las mismas fechas del año pasado ofrecían valores 3 y 4 veces superiores.
Las mismas pruebas han dado negativo en la presencia de sustancias contaminantes por encima de los niveles permitidos. Dichos test rastrean la aparición de hasta 900 compuestos plaguicidas y no plaguicidas.
Altas temperaturas y escasez de agua
El resultado de los análisis realizados indican por tanto que las causas más probables para esta reducción en el nivel de oxígeno en el agua fueron las altísimas temperaturas registradas ese día y los anteriores (que alcanzaron los 30 grados centígrados en el río) y la escasez de agua circulante.
Por lo que respecta a la aparición de espuma, circunscrita sólo a la zona de la pasarela Manterola, el salto del agua en el azud bajo la pasarela generó este fenómeno, que además fue de baja magnitud y desapareció a lo largo de la mañana.
El organismo de cuenca ha incrementado este verano, previamente a este suceso, la realización de análisis de las aguas del río, debido a que la escasez de agua a causa de la sequía hace más vulnerable al Segura y a su ecosistema. Fruto de este trabajo se pudo observar cómo los días anteriores el oxígeno en el río ya mostraba niveles más bajos de los habituales y altas temperaturas.