La actuación beneficiará a los 3.000 vecinos que residen en ambos núcleos urbanos, incluye el drenaje y la protección de la calzada en el paso de la rambla de Mesillo y se han invertido más de 202.000 euros
La Consejería de Presidencia y Fomento concluye la reparación del Camino Real, en Lorca, en la que se ha invertido más de 202.000 euros con el fin de mejorar la conexión de las pedanías de Aguaderas y Purias con la ciudad, lo que beneficiará a los 3.000 vecinos que residen en ambos núcleos urbanos.
El director general de Carreteras, José Antonio Fernández Lladó, y el concejal de Fomento, Ángel Meca, visitaron hoy el tramo en el que se ha actuado, que discurre paralelo a la rambla de Biznaga y comprende 3,4 kilómetros, y tiene su origen en el cruce con el camino de Catanga y el camino de Cañaveral.
"Las obras realizadas en estos últimos meses han puesto en valor esta importante vía de comunicación entre las pedanías y la propia ciudad, con la renovación del pavimento en la mayor parte de esta carretera", destacó Fernández Lladó, quien recordó que el camino tenía numerosas roturas, socavones y hundimientos.
Las obras, que se han ejecutado durante cuatro meses, han consistido en la limpieza y restauración de los márgenes de la carretera y la reposición de los taludes necesarios para la reconstrucción de la berma.
José Antonio Fernández destacó que la actuación incorpora dos nuevas obras de drenaje transversal y también contempla la protección de la calzada en el paso de la rambla de Mesillo, con lo que "intentamos evitar los daños en el pavimento de la carretera, que habitualmente se producen por la riada que provoca la incorporación de la citada rambla a la rambla de Biznaga".