El director general de Agricultura, Ganadería, Pesca y Acuicultura, Francisco González Zapater, se reunió esta semana con representantes de la Asociación Profesional para la Defensa de las Plantas (AEPLA) y del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, para establecer un protocolo de colaboración relacionado con el estudio de la ropa de protección frente a productos fitosanitarios.
Este estudio tiene como objetivo comprobar las prestaciones de las prendas de protección, tanto de una pieza como de dos, usadas durante los tratamientos fitosanitarios. Se pretende concienciar de que, frente a los equipos desechables utilizados actualmente, existen soluciones que proporcionan la protección necesaria, logrando un mayor confort que mejora su aceptación y el correcto uso de este nuevo tipo de prendas herméticas o que presentan repelentes contra la salpicadura.
Asimismo, se recabará información sobre el mantenimiento de la eficacia del tratamiento superficial utilizado en este tipo de ropa de protección en condiciones de uso reales.
En las últimas décadas se han producido grandes avances tecnológicos que han permitido el desarrollo de prendas de algodón y mezclas de algodón con acabados funcionales para su uso en diversas industrias que proporcionan un equilibrio entre la protección y el confort. Sin embargo, el desarrollo de vestimenta aceptable para los operadores de los plaguicidas en condiciones climáticas cálidas sigue siendo actualmente un desafío, ya que es difícil encontrar un equilibrio entre la protección y la comodidad.
Prueba piloto
La Región de Murcia ha sido seleccionada para realizar una prueba piloto en cultivos hortícolas de porte bajo al aire libre, para lo cual los trabajadores de una serie de empresas tipo que realizan las labores de tratamientos fitosanitarios, ya sea desde tractores con cabina abierta o de manera manual, utilizarán estos nuevos trajes de protección y darán su opinión sobre su confortabilidad.
El personal del Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería velará por el cumplimiento de aquellos requisitos y condicionantes establecidos en el procedimiento consensuado. Después de cada tratamiento los trajes serán recogidos para evaluar su mantenimiento y eficacia tras someterse a un procedimiento de lavado.
Este estudio se desarrollará durante los meses de septiembre a marzo de 2018, y se iniciará con una jornada de formación dirigida a aquellas empresas y trabajadores que participaran en este test de confort.
El director general de Agricultura destacó que la Administración "apoya cualquier actuación encaminada al uso sostenible de los productos fitosanitarios y en particular las acciones que mejoren la protección de los trabajadores y en definitiva la salud del operario, ofreciendo su total colaboración para estas u otras acciones".
Recordó asimismo que la Región fue seleccionada por el Ministerio en el año 2015 para la grabación de un vídeo sobre la gestión integrada de plagas y uso sostenible de los productos fitosanitarios, "que ha servido de ejemplo para otras comunidades".
Niveles de protección
La ropa de protección fitosanitaria se clasifica en tres niveles. La de nivel 1 es adecuada cuando el riesgo/exposición es relativamente bajo. Su eficacia se basa en la retención del contaminante. La ropa de nivel 2 es adecuada cuando el riesgo es mayor, pero no tan alto como para requerir el uso de materiales impermeables, resistentes a productos químicos. La de nivel 3 es adecuada cuando el riesgo/exposición potencial de contaminación requiere el uso de prendas confeccionadas con materiales impermeables, resistentes a productos químicos.