El portavoz de la formación naranja, Mario Gómez, ha lamentado que Murcia, la capital de la Región, no haya sido seleccionada, por parte del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicos, para recibir las ayudas europeas provenientes de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) y así poder llevar a cabo la recuperación urbana y comercial de los barrios de El Carmen y La Paz.

“Un varapalo importante”, ha manifestado Gómez, “si tenemos en cuenta que estos dos barrios tienen situaciones complejas, de gran vulnerabilidad social y económica, como así lo refleja el propio Ayuntamiento en su Estrategia Ciudad 2020”.

En este sentido, Gómez ha pedido a Ballesta que aclare que va a hacer ahora el Ayuntamiento con estos dos proyectos y si Murcia va a volver a presentarlos a la próxima convocatoria y en qué términos, con el mismo proyecto, con otro diferente, con modificaciones… "Que explique qué ha fallado, las causas, y como va a subsanar los supuestos errores de cara a una futura convocatoria". 

Inversiones en el Espíritu Santo

Por otra parte, el portavoz de C’s ha recordado que en el municipio ya se han llevado a cabo estrategias similares a la anterior, a través de la iniciativa Urban, concretamente, en el barrio del Espíritu Santo, donde se han invertido más de 9 millones de euros, cofinanciados con fondos europeos, para la construcción, entre otras infraestructuras, de un espectacular pabellón multiusos, que no tiene ninguna actividad regular, ni actuaciones programadas, ya sean deportivas o culturales.

Para Gómez, “este es un ejemplo más que claro de la improvisación y descoordinación de las políticas municipales del Partido Popular”.

Así, ha recordado al PP local que “el Ayuntamiento de Murcia, ante su falta de previsión, corre el riesgo de que Europa le sancione si las inversiones realizadas en la iniciativa Urban no están en funcionamiento antes de marzo del próximo año”.

Desde la formación naranja esperan que “el Gobierno presidido por José Ballesta dé un cambio definitivo a sus políticas cortoplacistas y de escaparate por el bien de todos los murcianos; y que gestione y justifique, de forma conveniente, las inversiones realizadas con cargo a fondos europeos, evitando posibles sanciones”.