La viceportavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Isabel Casalduero, ha defendido en la Comisión de Industria esta mañana una moción en la que reclamaba al Gobierno de la Nación que ratifique, sin más dilación, el Convenio número 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la recomendación número 201 sobre el trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores domésticos, equiparando sus derechos al del resto de trabajadores. Esta iniciativa se ha aprobado por unanimidad de los grupos parlamentarios.
"Han sido muchas las excusas que el Partido Popular ha dado para no proceder a la ratificación del tratado, poniendo pegas en cuanto a la adaptación de la legislación nacional a los preceptos incluídos en el mismo. Pero ninguna se sustenta por si misma, ya que hay tiempo suficiente para proceder a esa adaptación, debido a que una vez ratificado el convenio entraría en vigor un año después".
Casalduero indicó que a pesar de que en mayo de 2013 la Comisión de Empleo y Seguridad Social del Congreso de los Diputados consensuo´ y aprobó´ por unanimidad una enmienda transaccional a la Proposición de Ley que instaba al Gobierno a que en un plazo razonable evaluara la posibilidad de someter a ratificación el citado Convenio y la recomendación de la OIT y, en consecuencia, adaptara la legislación española en el sentido que regulan los citados textos, el PP ha hecho caso omiso y han pasado casi 3 años y dicha ratificación aún no se ha producido.
"España, tiene ya asumidas muchas de las consideraciones establecidas en el convenio, por eso mismo no entendemos las reticencias del Partido Popular a proceder a la ratificación del mismo, expresando así su compromiso de avanzar en la consecución de derechos para los trabajadores y trabajadoras domésticas en nuestro país, tan afianzados en otros sectores como la protección de riesgos laborales o las prestaciones por desempleo".
La parlamentaria socialista expresó que se trata de tender a la profesionalización de estos trabajos como auténticos sectores reconocidos y normalizados. Visibilizar y sacar de la economía sumergida y la falta de derechos a las decenas de miles de trabajadores y trabajadores, el 90% mujeres, que realizan trabajos domésticos, facilitarles el acceso a la protección de riesgos laborales de la que ahora mismo está excluída la actividad o a la protección por desempleo.
"La reducción de los ingresos en los hogares a consecuencia de la crisis ha provocado una reducción paralela del trabajo remunerado de cuidados que casi siempre realizan las mujeres y en no pocas ocasiones las mujeres inmigrantes, ahondando más en la brecha de las desigualdades de clase y de género".
Casalduero recordó que el último gobierno socialista de Zapatero ya reguló la actividad e integró el trabajo doméstico en el régimen general de la Seguridad Social, y también contemplaba la creación de un grupo de expertos para abordar la forma de establecer esa protección por desempleo, y muchas otras medidas que contempla el convenio. "El Partido Popular a su llegada al gobierno evitó la creación de esta comisión y, por tanto, que pudiéramos seguir avanzando en la equiparación de los derechos en el ámbito del trabajo doméstico, al resto de actividades", concluyó.