El presidente de la Fundación Jesús Abandonado, José Fernández, afirma que con la inauguración del nuevo Centro de Día "se pone en marcha un espacio en el que muchas personas se van a sentir acogidas y aceptadas".
El acto de inauguración fue llevado a cabo por José Manuel Lorca Planes, Obispo de la Diócesis de Cartagena, acompañado por el presidente de la Fundación, así como por el equipo directivo del centro, profesionales y voluntarios de la institución.
Tal y como explica José Fernández, "con este espacio", situado en la calle Barahundillo de la capital, junto al Comedor Social de la Fundación, "pretendemos no sólo cubrir las necesidades más elementales", sino dar una atención integral "con dignificación, para que las personas en riesgo de exclusión vuelvan a la sociedad en las mejores condiciones posibles".
La Fundación Jesús Abandonado quiere extender así la labor a las personas que durante el día están en la calle o no tienen ningún lugar al que acudir, ofreciendo un sitio donde poder llevar a cabo diferentes actividades con trabajadores y educadores sociales.
"Cada meta conseguida es una línea de salida de un nuevo proyecto, un nuevo punto de partida", subraya Fernández. "Este centro permite prestar una atención profesionalizada, intensiva y prolongada en el tiempo, ofreciendo un espacio de referencia a sus usuarios".
Este nuevo lugar de descanso permite proseguir el trabajo que ha llevado a la Fundación a ser un referente de solidaridad y compromiso en la Región de Murcia, trabajando de manera incansable para acoger a las personas en situación de necesidad.
Con el valor de la hospitalidad como referente, puesto en práctica cada día del año por trabajadores, usuarios y voluntarios, desde Jesús Abandonado y con la ayuda de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD), se ofrece un continuo de servicios y una atención integral que ahora amplía con este Centro de Día.
En este sentido, resalta la "ancha y profunda" relación de Fundación con la Orden de San Juan de Dios, reciente Premio Princesa de Asturias a la Concordia 2015, y el "carisma especial de la Orden en su trato a las personas en situación de necesidad".
Por último, Fernández quiso agradecer "a todo el pueblo de Murcia su apoyo continuo", así como "a sus instituciones, tanto la Comunidad Autónoma como el Ayuntamiento, y a los medios de comunicación, siempre dispuestos a colaborar".
La Fundación Jesús Abandonado de Murcia tiene como misión la atención de las personas en situación de exclusión social. Actualmente cuenta con 148 plazas en el Centro de Acogida de corta y media estancia, 54 en el de larga estancia, y 30 en viviendas con apoyo más 26 en la pensión social que gestiona la institución. El Comedor Social tiene capacidad para 300 servicios de alimentación diarios.
