La Federación de Cooperativas Agrarias de la Región, Fecoam, reclama un tipo de seguro que cubra las necesidades del sector agrario y permita asegurar las producciones reales. El presidente de la organización, Santiago Martínez Gabaldón, participó en una mesa redonda sobre seguros agrarios dentro de las actividades de la feria FAME Innowa, que se celebra en el recinto ferial de Ifepa, en Torre Pacheco, desde el pasado miércoles hasta mañana y que reúne a más de 200 empresas procedentes de la Región y de otros puntos del territorio nacional, así como de países como Italia, Holanda y Suiza.

Martínez Gabaldón, quien estuvo acompañado en la jornada por representantes de los sindicatos agrarios y por el director general de Industria Agroalimentaria y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón; el director de Enesa, José María García de Francisco, y la directora general de Agroseguro, Inmaculada Poveda, manifestó que el campo murciano demanda un seguro que permita rendimientos libres en los frutales, de manera que se pueda asegurar para el riesgo de helada las producciones reales esperadas. "Si una hectárea produce 40.000 kilos, pues que nos dejen asegurar los 40.000 kilos", expuso.

Para ello, mostró la disposición del sector a que se realice una zonificación pormenorizada de la Región y que se establezcan precios más altos para aquellas parcelas ubicadas en lugares con mayor riesgo o que incluso se prohíba la plantación de determinadas variedades según la zona.

Otra de las reivindicaciones del sector es que se permita a los agricultores suscribir un seguro que les garantice exclusivamente contra los riesgos de helada y pedrisco, sin obligarles a incluir otras opciones como la falta de cuajado de la fruta.

Por otro lado, Martínez Gabaldón pidió que se mejore el actual sistema de control de subvenciones de Enesa, para evitar los problemas que se han producido desde su implantación el pasado 1 de enero. Se trata de una base de datos que incluye información sobre si los agricultores se encuentran al corriente del pago de sus obligaciones tributarias, con la Seguridad Social y con las administraciones como condición previa para acceder a las ayudas previstas en el sistema de seguros agrarios.

También insistió en la necesidad de que el Gobierno regional restaure lo antes posible las ayudas para la contratación de los seguros agrarios, que llegaron a ascender a nueve millones de euros, pero que dejaron de abonarse en 2012 por la deuda contraída con Agroseguro.

El presidente de Fecoam recalcó que el seguro agrario es imprescindible para una agricultura como la murciana, "muy agresiva económicamente e inversora", y recordó que el objetivo "no es ganar dinero", sino garantizar las rentas del agricultor y ganadero. "Es la única herramienta que tienen para defenderse ante las adversidades climáticas", argumentó.

La agricultura ha evolucionado a pasos agigantados. La inversión realizada en los últimos años para introducir variedades extratempranas y que se adapten a las demandas de los clientes ha permitido que la producción de fruta de hueso, por ejemplo, se adelante a la del resto de Europa en el mercado, lo que supone un mayor beneficio para los agricultores.

Al incorporar variedades de recolección más temprana, también existe un mayor riesgo de que se produzca una helada que arruine la cosecha, por lo que las pólizas juegan un papel todavía más vital. Por tanto, Fecoam destaca que el seguro agrario es la única herramienta de gestión de riesgos y permite garantizar la viabilidad de las explotaciones, además de que es fundamental para fomentar una agricultura productiva y competitiva.

El objetivo principal del modelo de seguros agrarios es contribuir eficazmente a la estabilidad de las rentas de las explotaciones agropecuarias. El esquema es complejo y participan los agricultores y ganaderos, las cooperativas, las entidades aseguradoras, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, el Ministerio de Economía y las consejerías de Agricultura de las comunidades autónomas. El buen funcionamiento de este sistema depende, principalmente, de que se transmitan correctamente las necesidades de los agricultores y ganaderos hasta la Comisión General de Enesa y que las posibles soluciones que se propongan lleguen desde esta entidad hasta los usuarios del seguro.