La empresa familiar posee unos rasgos característicos que provocan pautas de comportamiento distintas a las compañías que no lo son. El componente familiar, los valores o el vínculo con la comunidad son algunos de los elementos que han permitido configurar una cultura empresarial diferenciada fruto de la convivencia entre familia y negocio.
Con el objetivo de dar a conocer los retos y particularidades de un colectivo que supone el 85% del tejido productivo y genera el 70% del PIB de la Región de Murcia, la Cátedra de Empresa Familiar y la Asociación Murciana de la Empresa Familiar (Amefmur) han puesto en marcha una nueva edición de un curso en el que universitarios y profesionales comparten conocimientos sobre los órganos de gobierno, los aspectos jurídicos o el proceso de sucesión.
El curso, inaugurado por la presidenta de Amefmur, Isabel Sánchez, y que ha finalizado con la visita a las instalaciones de Grupo Disfrimur, posee un carácter multidisciplinar y ha reunido a diversos especialistas sobre la materia. Las clases han sido de naturaleza práctica proponiendo debates constantes sobre las principales cuestiones.