El Sef planifica un total de 170 especialidades formativas de las que el 87 por ciento corresponden a certificados de profesionalidad, "lo que es una clara apuesta por mejorar la calidad de la oferta y que ésta tenga un reconocimiento oficial"
La Consejería de Presidencia y Empleo conecta la formación a las necesidades del mercado laboral regional gracias a la definición de las prioridades sobre las áreas temáticas de los cursos que serán objeto de subvención por parte del Servicio Regional de Empleo y Formación (Sef).
Así lo explicó hoy el responsable del Sef, Alejandro Zamora, que indicó que esta iniciativa tiene el doble objetivo de "proveer a las empresas de trabajadores con la necesaria cualificación y, por otra parte, proporcionar a los trabajadores la formación que demandan las empresas y así mejorar la empleabilidad y la inserción en el mercado de trabajo".
Con estas acciones formativas la Comunidad actualiza y da respuesta a las necesidades que se han detectado en el mercado productivo de nuestra Región e incluso se adelanta a ellas, con el objeto de proporcionar a las empresas los trabajadores más cualificados para el desarrollo de su actividad económica, mejorando así su productividad y competitividad.
Para la determinación de la citada oferta de formación financiada por el Sef, Alejandro Zamora explicó que "se ha llevado a cabo un detallado análisis estadístico de las variables del mercado de trabajo" y además, como novedad, se han realizado reuniones de unos grupos de trabajo sectoriales constituidos por empresas, cámaras de comercio, organizaciones empresariales y sindicales, centros tecnológicos, en las que han aportado sus conocimientos sobre las necesidades formativas del sector y de las previsiones en cuanto a las ocupaciones del mismo.
Zamora explicó que durante dos meses, más de 60 personas han participado en las reuniones de los seis grupos de trabajo sectoriales, a los que agradeció su trabajo sobre la detección de las necesidades de formación.
Apuesta por mejorar la calidad de la oferta formativa
Alejandro Zamora dijo que a la planificación que presentó hoy "se han incorporado un total de 170 especialidades formativas, de las que el 87 por ciento corresponden a certificados de profesionalidad, lo que es una clara apuesta por mejorar la calidad de la oferta formativa y que ésta tenga un reconocimiento oficial".
"Hay una indudable convicción y apuesta en este sentido ya que el futuro apunta hacia una cada vez mayor profesionalización de los sectores más tradicionales, así como una mayor innovación y tecnificación de todos en general", destacó Zamora.
La formación en idiomas extranjeros es la principal prioridad detectada para acciones formativas financiadas por el Sef. Así, el responsable regional explicó que los idiomas se consideran necesarios tanto para el desarrollo y mejora de la actividad ligada al sector turístico, como también para el transporte transeuropeo, la exportación de productos y la internacionalización de las empresas.
Por este motivo, la oferta diseñada incluye diferentes especialidades formativas en idiomas (inglés, francés y alemán) así como la impartición, en modalidad bilingüe, de otras especialidades ligadas a estas actividades.
En segundo lugar, el responsable regional indicó que se va a dar preferencia a la formación que tenga relación con la obtención de los carnés o de acreditaciones necesarias para el ejercicio profesional como, por ejemplo, formación básica en seguridad marítima, la Tarjeta Profesional de la Construcción, transporte sanitario o atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales.
"En agricultura existe una clara necesidad de formar en aplicación de productos fitosanitarios y también hay buenas perspectivas para el sector de la agricultura ecológica. Por este motivo se han introducido especialidades ligadas a éste y otros cultivos que van en la línea de alcanzar mayores cuotas de especialización", subrayó el director.
En la industria alimentaria destacan necesidades ligadas a la mejora de la calidad, la innovación y la eficiencia en el uso del agua y de la energía.
En Comercio, Hostelería y Turismo, además de los idiomas y la especialización de ocupaciones tradicionales (cocina, restaurante, etc.) se unen las relacionadas con el uso de nuevas tecnologías y conocimientos que aportan valor añadido al sector de la restauración (sumillería).
En los sectores industriales ligados a la fabricación mecánica y el mantenimiento, se ha apostado por una oferta diversificada que dé respuesta al amplio espectro de empresas que tienen presencia en nuestra Región.