Desde el comienzo de la Campaña de Anillamiento del Paso Prenupcial de Aves en Isla Grosa, iniciada por ANSE el pasado 20 de marzo, los anilladores de la asociación han capturado (y liberado) más de 1000 aves de 38 especies distintas. La mayoría de las especies capturadas son pequeñas aves migradoras que se dirigen desde África hacia sus lugares habituales de reproducción en el centro y norte de Europa.
La campaña de anillamiento forma parte del proyecto Piccole Isole de anillamiento en pequeñas islas del Mediterráneo, que tiene como objetivo el estudio del fenómeno migratorio, y se realiza un año más por voluntarios de ANSE que se encuentran permanentemente en la isla durante los meses de primavera.
El pasado 24 de abril, los anilladores de ANSE detectaron en la playa de Isla Grosa un ejemplar de Cormorán moñudo Phalacrocórax aristotelis incapaz de volar y con serias dificultades para moverse. Una vez que fue capturado, además de un sedal de pesca deportiva enredado en las alas, se detectó la presencia de dos anzuelos que el ave llevaba clavados en el pico y en una de las patas.
Tras un examen superficial del ave se procedió a retirar el sedal y los anzuelos y desinfectar las heridas. Posteriormente fue liberado en la misma playa de Isla Grosa en aparente estado de buena salud.
El Cormorán moñudo es un pequeño cormorán exclusivamente marino que cría en los acantilados de Isla Grosa y del litoral de Cartagena entre otros puntos de la costa española. Se trata de una especie catalogada como vulnerable a escala nacional y considerada dentro de la lista regional como “En Peligro Crítico”. Precisamente, su principal amenaza es la actividad pesquera, siendo la captura accidental en artes de pesca la causa de mortalidad adulta más importante
Isla Grosa cuenta con la mayor colonia conocida para esta especie en la Región de Murcia con aproximadamente unas 15 parejas reproductoras. La isla está declarada como “Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA)” entre otras cosas por la presencia de esta especie que viene criando de forma regular en la zona desde el año 2008.
A pesar de que la ZEPA tiene una zona marítima de amortiguación en la que la pesca está prohibida, aún son muchas las embarcaciones, sobre todo deportivas, que acuden al entorno de la isla a realizar esta actividad.. Aunque la presencia de anilladores ayuda a controlar la llegada de pescadores a la isla y su entorno, es necesario dotar a la zona y su entorno de medios de vigilancia adecuados por parte de la Comunidad Autónoma, en cumplimiento del Plan de Gestión aprobado en su día.