El diputado del PP y vicepresidente de la Asamblea Regional, Alberto Garre, ha manifestado esta mañana que "los socialistas, que fueron los adalides de la desalación durante el Gobierno de Zapatero, porque estaban en contra de los trasvases, quieren abanderar ahora la lucha contra las desaladoras".
El diputado ha respondido así a las críticas de los socialistas sobre la desaladora de Escombreras, al tiempo que ha explicado "todas las plantas de la costa mediterránea son necesarias", y ha añadido que "tanto es así, que su construcción iba incluida en el anexo 2 del PHN que diseñó el gobierno del PP cuando era presidente Aznar, como complemento al trasvase del Ebro derogado por los socialistas".
Durante su intervención ante los medios el vicepresidente de la Cámara ha manifestado que "si hay alguna desaladora necesaria, es la de Escombreras, y ha explicado que existen para ello dos razones fundamentales. En primer lugar, "que se encuentra al final del último ramal del Tajo Segura y cuando no hay agua en la cabecera del Tajo los que más sufren la sequía son los agricultores del Campo de Cartagena", y en segundo lugar "por su ubicación estratégica, dado que las plantas de energía eléctrica, de gas, la industria pesada de Escombreras no tendrían futuro si no tuvieran agua".
El diputado se ha mostrado sorprendido de que los socialistas hayan fijado su posición ante este asunto antes de la comparecencia del Consejero de Agricultura, Antonio Cerdá, en el pleno de la Asamblea, solicitada por el Grupo Parlamentario Popular y prevista para próximas fechas, lo que ha calificado como "una falta de respeto hacia los ciudadanos y hacia la labor que desarrolla la propia institución legislativa".