El diputado de IU-Verdes en la Asamblea Regional de Murcia, José Antonio Pujante, ha denunciado hoy el "cinismo" del PP en materia de violencia de género, y ha recriminado a ese partido que "sus discursos no se corresponden con sus hechos".
En declaraciones a los medios de comunicación minutos antes de comenzar la sesión plenaria de la tarde, Pujante ha criticado que la partida destinada a la prevención de violencia de género acumula desde los presupuestos autonómicos de 2012 una disminución del 29 por ciento.
Ha indicado que a este "recorte" presupuestario hay se añaden las consecuencias de la comarcalización de los Centros de Atención Especializada para Mujeres Víctimas de Violencia de Género (CAVIS).
Al respecto, ha recordado que el número de CAVIS en la Región ha pasado de 22 a 15, algo que, a su juicio, dificulta a muchas mujeres la posibilidad de acogerse a la ayuda que prestan esos centros.
Pujante ha puesto también de relieve que la crisis económica ha influido en el aumento de la violencia de género, porque muchas mujeres "se encuentran atrapadas porque no tienen ayudas, como la Renta Básica de Inserción" y no pueden separarse.
A esto, ha añadido la violencia estructural del actual sistema económico y social, donde la mujer percibe de media un 20 por ciento menos de salario que el hombre por realizar el mismo trabajo, sobre todo en el ámbito laboral privado.
"Nos encontramos situaciones aún sorprendentes como que se despida a una mujer por quedarse embarazada mientras las instituciones públicas callan, y esa es la razón por la que esas mujeres se ven arrojadas a la exclusión social".
Además, el parlamentario se ha referido como "indecente" a la reforma de la Ley del Aborto que ha planteado el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, y ha asegurado que "provoca una situación de tensión social innecesaria porque no se trata de una demanda de la sociedad".
Asimismo, ha opinado que si el argumento esgrimido por el PP para llevar adelante la reforma es que estaba en su problema electoral, también podría haberlo usado para otros puntos como que no subiría los impuestos.
"La reforma de Ruiz Gallardón pretende restringir el derecho legítimo de toda mujer a decidir sobre su maternidad, incluso suprimiendo la decisión de interrumpir el embarazo en caso de malformación grave del feto", ha añadido.
Según Pujante, esta reforma conlleva "un retroceso prácticamente a la Edad Media, inaceptable e inadmisible, que supone el ejercicio desde el poder político de la violencia institucional hacia la mujer".