El director general García Lidón advirtió que "si no se han realizado adecuadamente los procesos de investigación y desarrollo de las nuevas variedades pueden surgir problemas"
El director general de Industria Agroalimentaria y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, destacó que "el empleo de variedades protegidas es un instrumento básico para la competitividad del sector de frutales". García Lidón realizó estas declaraciones en el marco de las Jornadas sobre 'La mejora vegetal en frutales y las oportunidades de incremento de la producción', celebradas esta semana en Archena, por iniciativa de la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (ANOVE), y dirigida a profesionales del sector agrícola.
El responsable autonómico destacó que la Consejería de Agricultura y Agua "ha concedido ayudas para la reconversión de 1.500 hectáreas de frutales en la Región de Murcia, mediante la introducción de nuevas variedades de mayor calidad organoléptica, de recolección más temprana y que se ajusten a los nuevos gustos de los consumidores".
En este sentido, añadió que el proceso de reconversión debe hacerse con variedades protegidas "porque estas son el fruto de laboriosos programas de mejora y selección". De no ser así, advirtió, "la reconversión entrañaría un riesgo empresarial, ya que si no se han realizado adecuadamente los procesos de investigación y desarrollo de las nuevas variedades pueden surgir problemas como la aparición de fisiopatías, la no adecuación al medio donde se van a desarrollar o la introducción de nuevas enfermedades".
Según se puso de manifiesto por los ponentes que participaron en las Jornadas, estos problemas son solventados con el establecimiento de un sistema de registro y comprobación en campo de las nuevas variedades durante un período mínimo de cinco años, así como con un sistema de certificación para la obtención de material vegetal.
Protección de derechos
Se destacó asimismo que sin la protección de los derechos intelectuales de los obtentores no existe posibilidad de innovación, derechos que, según la legislación vigente, se extienden durante un período de 30 años. Se considera imprescindible que la propiedad intelectual de los obtentores y de las innovaciones sea revertida con un sistema de compensaciones monetarias a través del pago de las regalías o royalties, para dar continuidad a los costosos sistemas de investigación e innovación.
García Lidón apuntó que "este sistema de implantación de variedades protegidas se ha incrementado en los últimos años". Según fuentes de la Oficina Europea de Variedades Vegetales, hasta el año 2013 se han gestionado más de 4.500 expedientes para la protección de los derechos de obtentor en frutales. La Región de Murcia cuenta en la actualidad con 40 viveros de frutales registrados, con una producción aproximada de 1,4 millones de plantas, de las que 700.000 corresponden a almendro, albaricoquero, melocotonero y ciruelo.
El director general destacó la necesidad de que los obtentores-investigadores, los viveros, los agricultores y los consumidores colaboren para conseguir los objetivos anteriormente apuntados.